El aislamiento se ha convertido en una de las estrategias más recomendadas en el mundo frente a la pandemia del coronavirus COVID-19 y ha provocado que millones de personas cambien por completo su dinámica diaria y que prácticas comunes, como la compra de alimentos o productos de primera necesidad en un supermercado, se consideren un riesgo para la salud.
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Sin embargo, han surgido alternativas que ayudan a que el aislamiento en casa sea más llevadero. Los servicios a domicilio son considerados indispensables en el actual contexto, pero un cuestionamiento que surge es: ¿realmente es seguro pedir comida a domicilio?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) determinó que el COVID-19 no se transmite a través de los alimentos, sin embargo, el riesgo de un contagio se da cuando un repartidor y un aislado tienen contacto cercano.
En Europa, donde el nuevo coronavirus se ha propagado rápidamente, las empresas de alimentos que ofrecen servicios a domicilio han establecido protocolos de entrega por el bienestar de sus trabajadores y clientes.
Estos protocolos están basados en las recomendaciones de la OMS y orientados a evitar el contacto entre las personas.
Estas son las recomendaciones para que comprar alimentos a domicilio sea seguro
Repartidores deben estar protegidos
Los trabajadores de los servicios a domicilios deben contar con mascarillas y otros elementos de protección que eviten la propagación del virus.
Evita el pago en efectivo
El contagio resulta más fácil cuando manejamos billetes o monedas, por lo cual es más seguro pagar con métodos electrónicos como tarjetas de crédito o transferencias.
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Entrega sin contacto
Algunas empresas han instruido a sus trabajadores para dejar los pedidos en la puerta de los hogares y retirarse, de modo que no exista ningún riesgo de contacto.
Empresas responsables
Las compañías que ofrezcan este tipo de servicio deberán implementar campañas de educación sobre la higiene y la bioseguridad básica tanto a sus trabajadores, como a sus clientes.
Productos de higiene para repartidores
Frente a la contingencia, las empresas deben velar por la seguridad de sus trabajadores y clientes, por lo que el suministro de elementos como gel desinfectante, cubrebocas y jabón podría convertirse en prioridad.
