Dos personas fueron capturadas por el rapto de un joven secuestrado en Boyacá durante casi 20 días.
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Edison Tocua viajaba con su padre el pasado 2 de diciembre hacia Zipaquirá. El joven boyacense fue raptado cuando entró a una casa en el municipio, ubicado en el norte de la Sabana de Bogotá. Allí lo raptaron, le pusieron una capucha y lo llevaron a un paraje boscoso en Coper, occidente de Boyacá. El joven secuestrado en Boyacá fue liberado este 25 de diciembre por el Gaula, en un operativo cinematográfico.
El operativo se registró este día de Navidad en una zona selvática entre Boyacá y Cundinamarca. Los delincuentes amarraron al joven secuestrado a un árbol, y varias veces le hicieron pasar hambre. «Me daban una comida al día, a veces dos si estaban de buen genio y si no a veces pasaban tres o cuatro días sin que me dieran comida», narró Tocua a Noticias Caracol.
Una de las imágenes más preocupantes que recibió su familia fue en la que parecía que le hubieran cortado un dedo. «Me hicieron un corte en la mano y ellos decían que eran buena gente y me lo amarraban acá y me hacían grabar los videos con dramatización para que le llegaran a mi familia y para que pagaran el rescate lo más pronto. Si no hacía lo que ellos decían entonces decían que me iban a cortar el dedo (…) la mano después», dijo.
Por el joven secuestrado en Boyacá, sus captores pedían un rescate de 1000 millones de pesos.