Un estudio de la Universidad de los Andes y Ecopetrol encontró que los buses nuevos de TransMilenio redujeron el material particulado.
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En los últimos seis meses, más de 800 buses han ingresado al sistema TransMilenio. Los vehículos, con motores de diésel y de gas natural, han reemplazado buses que, en algunos casos, completaban casi 20 años de operación. Con este cambio, la Alcaldía promovió una posibilidad de un mejor medio ambiente para la ciudad. Los resultados de un estudio de la Universidad de los Andes apuntan a que estos son aún más importantes de lo esperado.
El estudio publicado este viernes por esta universidad y Ecopetrol investigó la proporción de material particulado y hollín) en los buses y estaciones del sistema. Este contaminante es altamente peligroso para los sistemas respiratorios.
El estudio detectó que el material particulado medido entre junio y noviembre de 2019, posterior a la entrada en operación de la flota de buses nuevos de TransMilenio, era un 49,5% menor que en 2015 y 2017, cuando no había iniciado el reemplazo de los buses. La medición se hizo en 260 buses y 12 troncales, con 46 estaciones y 9 portales involucrados en las mediciones realizadas durante cuatro meses.
La investigación se efectuó gracias a una alianza entre Ecopetrol, TransMilenio y las secretarías distritales de Movilidad y de Ambiente. Su objetivo fue realizar estudios sobre movilidad sostenible y mejoras en el transporte masivo de pasajeros de Bogotá.
¿Dónde están las mejoras?
Dos elementos influyeron notoriamente en la conformación de estas transformaciones: el cambio de tecnologías de los nuevos buses de TransMilenio y una fuerte inversión de Ecopetrol para disminuir la contaminación de azufre en los combustibles usados por el sistema.
Uno de los elementos cruciales de esta decisión es la compra de buses con gas natural, que cumplen las normativas Euro VI de emisiones. Además de reducir la huella de gases invernadero, los motores de gas natural no tienen impurezas como azufre y aromáticos, por lo que emiten un 96% menos de material particulado. La llegada de 741 buses en total con gas natural, tanto articulados como biarticulados, ha permitido la mejora de estas condiciones con un consumo cercano a los 32.000 metros cúbicos de gas diarios.
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Por otro lado, los buses de motor diésel con tecnología Euro V tienen reducciones muy marcadas con respecto a tecnologías anteriores. Los que llegaron a TransMilenio entre 2000 y 2003 tenían tecnologías Euro II y Euro III, que emiten hasta cinco veces más materiales particulados que los de tecnología Euro V con motor diésel.
Para reducir aún más las emisiones, los buses nuevos de TransMilenio con motor diésel recibieron filtros de partículas. Esto ha permitido que, aunque la tecnología de estos 700 buses que llegan desde el pasado junio hasta junio de 2020 no sea la última, puedan operar eficientemente.
Finalmente, Ecopetrol está entregando a Bogotá 1100 barriles diarios de combustible ultrabajo en azufre: 10 partes por millón, respecto a las 25 partes por millón que se entrega en el diésel a otros sitios.
Apoyo a los buses nuevos de TransMilenio
“Hoy podemos decirles a los bogotanos que estamos entregando diésel de la mejor calidad internacional y todo el gas natural que requieren los nuevos buses. Estos combustibles limpios son nuestro aporte para que respiremos un mejor aire en la capital”, resaltó el presidente de Ecopetrol, Felipe Bayón.
A su vez, la ministra de Minas y Energía, María Fernanda Suárez, destacó las inversiones en este aspecto. “Colombia se subió a la movilidad sostenible y estamos viendo los primeros resultados. En los temas de calidad del aire, que tanto afectan la salud de los habitantes de las ciudades, hemos dado un salto significativo en la calidad de los combustibles pasando en diésel de 25 a 10 partes por millón de azúfre y en gasolina de 150 a menos de 100, alcanzando de manera anticipada las metas trazadas para el 2025”, dijo.
Igualmente, el secretario de Ambiente, Óscar López, destacó que TransMilenio “es un bajo aportante de emisiones de material particulado”. Aún así, consideró que la reducción de emisiones de manera tan expedita es “un logro indudablemente valioso para la ciudad”.