El director de la UNP dejó caer la propuesta, que exigiría garantías de seguridad para los escoltas de la entidad.
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El asesinato de dos escoltas de la Unidad Nacional de Protección (UNP) en Chocó ha causado serias preocupaciones. Los funcionarios que desaparecieron en medio de su función de vigilancia serían víctimas de un «plan pistola» contra la entidad. Por esto, el director de la UNP, Pablo Elías González, lanzó una grave alerta y una propuesta muy polémica.
La alerta es, justamente, una serie de amenazas contra los funcionarios de la Unidad. Un panfleto que empezó a circular en varias zonas del país designó a los escoltas como «objetivo militar». Estas zonas serían Chocó, Cauca, Putumayo, Nariño y el Catatumbo, algunas de las más afectadas por la ola de violencia en el país.
González, en diálogo con CM&, pidió que se modifiquen los protocolos de protección a los líderes sociales. Pero también aseguró que estas revisiones podrían implicar dejar a protegidos por la UNP sin escoltas.
Según el director de la UNP, se estaría verificando «cómo se modifica el protocolo o se dan instrucciones específicas en el sentido de que a ciertas zonas solamente se haga presencia por parte de escoltas de la UNP siempre y cuando existan garantías de seguridad en la zona».
De ser así, cientos de líderes sociales y políticos de las regiones de las amenazas podrían quedar sin vigilancia. Esto permitiría una persecución sistemática a los líderes en estas zonas afectadas por disidencias de las Farc, guerras de carteles y grupos armados organizados.
