La crisis que vive Venezuela ha afectado a miles de ciudadanos. No en vano, se han visto en la necesidad de emprender camino rumbo a otros países en busca de oportunidades. Sin embargo, la suerte tampoco los ha acompañado. Y es que la falta de oportunidades y xenofobia marcada por parte de algunas personas dificultan más el panorama.
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Razón por la cual, el Gobierno de Nicolás Maduro manifestó su «más contundente repudio a los actos de xenofobia, agresión y persecución». Dichas palabras se refirieron a lo vivido por algunos emigrantes venezolanos en suelo peruano. Además, acusó a las autoridades de ese país de permitir y cometer esos ataques.
Venezuela denunció que el Gobierno de Martín Vizcarra viola e incumple sus responsabilidades internacionales. El principal argumento que utilizan es que «promueven y permiten actos de segregación y xenofobia contra ciudadanos que han ejercido su legítimo derecho a la movilidad humana».
Según la Cancillería , estas acciones que califica de «indignas», son parte del «plan de agresión contra Venezuela». De igual afirma que es impulsado por varios gobiernos racistas de la región, en componenda con la oposición golpista venezolana».
Venezuela reiteró su denuncia de este sábado de que el Gobierno y las empresas peruanas ponen «obstáculos» para abastecer de combustible a los aviones con los que la Administración de Maduro ejecuta un plan de repatriación de venezolanos, por lo que suspendieron el programa.
El Gobierno de Maduro exigió respeto a «los legítimos derechos» de los venezolanos que han migrado a «los países cuyos gobiernos han incurrido en acciones hostiles contra Venezuela».
En el comunicado, Cancillería anunció que presentará «acciones legales e institucionales de denuncia y protección de sus ciudadanos» ante la Organización de las Naciones Unidas.
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