El peso colombiano se devaluó este lunes un 2,82 % frente al dólar, que se negoció en un promedio de 3.461,07 pesos y alcanzó un máximo de 3.483 pesos, un crecimiento que de seguir así puede ser incontrolable y perjudicar, principalmente, a los importadores, según los expertos.
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Así lo aseguró a Efe el director del departamento de Economía de la Universidad Sergio Arboleda, Javier Enrique Delgado, quien explicó que si el dólar se mantiene por encima de la barrera psicológica de los 3.400 pesos colombianos el país, que importa mucho más de lo exporta, corre un «riesgo muy alto».
«Analizando datos históricos yo pienso que 3.400 ya es un riesgo muy alto, de hecho 3.300 sería como esa línea de preocupación. Pero definitivamente en más de 3.400 ya estaríamos en un crecimiento que no podríamos controlar y golpearía muchísimo nuestra economía», manifestó.
En Colombia, las exportaciones sumaron el año pasado 41.831 millones de dólares y las importaciones alcanzaron los 51.230 millones de dólares.
El docente señaló que el aumento en el precio del dólar obedece a diversos factores tanto externos como internos, entre los que puso la rebaja que hizo la semana pasada la Reserva Federal (Fed) de EE.UU. a los tipos de interés hasta el rango de entre 2 % y 2,25 % en respuesta a la debilidad económica global.
«Cuando un banco central toma la decisión de bajar las tasas de interés lo que quiere es incentivar la economía, las personas tienen la posibilidad de acceder a crédito, pero también baja la tasa de interés de captación, que es la que se le paga al ahorro, entonces a las personas no les interesa tener su dinero guardado», explicó.
También apuntó a los inversionistas, que buscan llevar su dinero a «lugares donde puedan tener mejores rentabilidades», y señaló el caso colombiano, que tiene «una demanda de dólares en el mercado interno tan alta que hace que el precio aumente».
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Entre los factores internos, Delgado mencionó el precio del barril de petróleo Brent, «que está subiendo un poco más que en la referencia del año pasado».
«En esa combinación de variables (tanto internas como externas) algunas mantienen abajo el precio y otras arriba, las que pesan más son las que determinan el comportamiento del dólar», explicó.
Las consecuencias de ello están en que un precio del dólar cada vez más alto desincentiva a quienes en Colombia se endeudan en la moneda estadounidense porque «tienen que pagar en pesos», como es el caso de los importadores.
«Todas las empresas que tienen deudas en dólares ven golpeado sus estados financieros porque el costo de la deuda aumentó», añadió.
Sin embargo, Delgado cree que la situación es favorable para los exportadores y para los turistas «porque el dólar cada vez se valoriza más y sus estados financieros no se están viendo golpeados sino que se están viendo favorecidos por el tipo de cambio».
«Este fenómeno es preocupante porque somos una economía básicamente importadora, importamos más de lo que exportamos. Nuestra balanza comercial es deficitaria», concluyó.
