El pasado 15 de septiembre del año 2017, se conoció la dura noticia de la muerte del pequeño Miguel Ángel Rivera, de tan solo dos años, a manos de su mamá y su padrastro, de 22 años años de edad.
Pues tras revelar las pruebas que indican que su mamá lo asfixió en compañía del padrastro y que además mintió al decir que el niño se había pegado en la cabeza y había vomitado, la justicia los condenó a 30 años de cárcel a cada uno.
Las investigaciones revelaron que el menor sufrió un duro caso de maltrato infantil y que era golpeado constantemente y por eso la herida en la cabeza del menor.
La hermana de la madre confirmó a la justicia que los dos maltrataban al pequeño y que consumían drogas y alcohol en presencia del pequeño.
Ahora tendrán que pagar una condena de 30 años de cárcel.
