Hace dos semanas los uribistas solo pedían una cosa: que el presidente Iván Duque no sancionara la ley estatutaria de la Justicia Especial para la Paz. La eliminación de la JEP como promesa de campaña a la Presidencia, no se va a poder dar, a pesar de las presiones al primer mandatario.
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Pues sí. Álvaro Uribe cambió de parecer y en menos de 15 días, ya piensa que es imposible eliminar la JEP, pero apunta a hacerle cambios sustantivos, como cambiar las fechas en las que puede operar.
- Solo funcionaría para “para delitos que se hubieran cometido hasta el 1 de diciembre de 2016″.
- Castigos en contra los reincidentes, en donde pierdan los beneficios
- Que la Fiscalía continúe investigando bajo su propia competencia
- Que los delitos contra menores de edad no sean tenidos en cuenta en la JEP, sino que sean tramitados por la justicia ordinaria.
Así, el cambio de parecer apuntaría a que Uribe sabe que no podrán acabar con la institución, pero sí quitarle algunos puntos claves en su funcionamiento para dejarla sin piso y que la justicia ordinaria tenga más poderes.