Seguramente usted ha visto comerciales en los que el uso de una tarjeta de crédito le da beneficios. Ya sea con descuentos, acumulación de millas, o puntos en algunos almacenes, el uso de dinero plástico puede servirle. La contraparte suele ser el pago de intereses y cuotas de manejo, pero eso no debe impedirle usarlos.
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Así lo plantea el reconocido youtuber financiero Juan Diego Gómez, autor de tres libros sobre el tema. El youtuber reconoció que miles de personas achacan el motivo de sus problemas a la tarjeta de crédito. Pero afirmó que esto es en realidad una excusa.
«La tarjeta de crédito no compra por sí sola, eso es una excusa. Cuando yo compro con una tarjeta de crédito después de la fecha de corte, y pago a una cuota, estoy trabajando con la plata del banco. No le pago intereses y gano millas. Eso se llama apalancarse con un banco, y hasta ahí va bien», dice.
Algunos bancos ofrecen entre sus beneficios acumular millas en aerolíneas, puntos en almacenes de cadena o tiendas de departamentos, e incluso productos financieros.
Entre las recomendaciones también está no tener varias tarjetas, y mucho menos, usarlas para comprar a plazos muy largos. En un país donde la tasa de interés a las compras con tarjetas de crédito superan en ocasiones el 30%, una persona puede pagar más del doble comprando un producto con tarjeta.
«Tú le llevas la plata a un banco y la metes en una cuenta de ahorros (…). El banco, con la plata que tú llevas, feliz, muerto de la risa, te dice ‘debido a tu buen comportamiento de crédito, hemos decidido extenderte el cupo de crédito. Empiezas a consumir, ¿sabes cuánto te cobran en tasas por esa utilización? ¡El 25%!», asegura.