La Justicia Especial para la Paz (JEP) negó la solicitud de libertad condicional que presentó Mario Ancizar Moreno Hueso, un exguerrillero de las FARC, porque los crímenes por los que fue procesado no tienen relación con el conflicto armado colombiano.
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Así lo informó ese tribunal, que en un comunicado detalló que Moreno Hueso fue «procesado como coautor de los delitos de homicidio agravado; tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones, y hurto calificado y agravado».
«Los hechos por los cuales está privado de la libertad» el exguerrillero, preso en la cárcel La Picaleña de la ciudad de Ibagué, en el Tolima, ocurrieron en marzo de 2015, cuando un grupo de criminales asaltó un restaurante en el departamento de Cundinamarca (centro) y asesinó a Édgar Raúl Daza Rodríguez.
En su resolución, del 3 de enero pasado, la JEP aseguró que pese a que Moreno Hueso fue certificado como miembro de las desmovilizadas y desarmadas FARC «no se puede deducir que las conductas por las cuales está siendo procesado ‘tengan relación alguna’ con el conflicto armado».
En ese sentido detalló que en el proceso que se le sigue al exguerrillero «no se mencionó nada acerca de su supuesta condición de integrante» de las FARC.
«Por el contrario, el proceso penal que se ha llevado en su contra demuestra que Moreno Hueso hacía parte de una organización delincuencial dedicada al hurto, la comercialización de estupefacientes y las armas de fuego», agregó la información.
La JEP es la columna vertebral del acuerdo de paz firmado por el Gobierno con las FARC y a ese tribunal se someten excombatientes y militares acusados de delitos atroces.
