El próximo 26 de agosto se votará la Consulta Anticorrupción que busca, por medio de siete mandatos, eliminar la corrupción en el servicio público del país y la administración pública.
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La consulta anticorrupción, incentivada por Claudia López y Angélica Lozano busca que más de 12 millones de colombianos voten por el ‘sí’ siete veces, tendrá un costo de 310.479 millones de pesos.
Este fue el dinero que el Ministerio de Hacienda asignó a la Registraduría, entre los que se ubican los dineros para los kits electorales, que serán lo que más cueste a la larga.
El dinero se dividiría así, según El Tiempo: impresión de tarjetones, transporte, puestos de votación y, entre otros aspectos, conteo y publicación de resultados.
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Esto fue lo que Claudia López le dijo a Publimetro sobre la Consulta:
Salió de una campaña para la otra… ¿Cómo va con la consulta anticorrupción?
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El que persevera alcanza y así ha sido con la consulta de la corrupción. Lo primero es decir que la consulta es ciudadana. No es de nadie y a la vez es de todos. Esta consulta es de los que votan, de los que no votan… de los del ‘sí’, de los del ‘no’. ¡De todos los partidos políticos! Todos los colombianos somos los dueños de esta consulta. Los más de cuatro millones de colombianos que firmaron para poder salir a votar los siete mandatos de esta iniciativa ciudadana que no quiso aprobar el Congreso. Vamos a darle una orden al Congreso, para que el otro año expida unas leyes.
Como la de bajarle el sueldo a los congresistas
Sí. La idea es que los senadores y los representantes ganen un poquito menos, para que los de los cargos de abajo, los servidores públicos de carrera, los que están trabajando en gobernaciones y alcaldías, los soldados o policías ganen un poco más. Que los de abajo se ganen un poquito más y que la cúpula se baje un poquito el sueldo. Que haya meritocracia. Es un acto de justicia elemental.
Bueno, este punto es de los más populares en las calles, pero ¿por qué el sueldo de los congresistas tiene que ver con la corrupción del país?
Porque buena parte de la corrupción, la gente en el sector público, en la rama judicial, o en el Ejecutivo, tienen salarios muy precarios, entonces la gente termina con la tentación de ver cómo hacen la vuelta para cuadrar sus ingresos.
Entonces hagamos la cuenta. Los ministros se ganan 25 salarios mínimos (cerca de 20 millones de pesos), pero los congresistas han encontrado la forma de darse gabelas y ganarse al Congreso. ¡Se ganan 41 salarios mínimos! (más de 30 millones de pesos). Entonces queremos decir que los ministros y los congresistas, que tienen la misma importancia, el mismo nivel de responsabilidades, se ganen 25 salarios mínimos. ¡Que es un sueldazo! Y con eso logramos pagarle mejor a más gente.
¿Cuáles son los otros mandatos?
Otro de los puntos que es muy importante: que los corruptos no tengan regímenes especiales de cárcel. Que el que le robe a los colombianos, pague su condena en una celda. Que al que consigue contratos con corrupción y por debajo de cuerda, o se roba la plata, que le podamos cancelar sin aviso y sin ningún tipo de indemnización cualquier tipo de contrato que tenga con el Estado y que no se le vuelva a contratar jamás.
Otro es que se contrate en el país con pliegos tipo, es decir, que no se puedan acomodar de acuerdo al amigo, al vecino. Lo que está pasando es que los empresarios ya no se presentan a las licitaciones para contratar con el Estado porque para qué gastan plata en algo que saben que ya está arreglado. Entonces la idea es que dejen de acomodar los pliegos de condiciones y que sean los mismos para todos los contratos del país y así no se nos puedan acomodar.
Otro mandato, que debo confesar que es el que más me interesa, es el fin de la ‘mermelada’. La idea es que la gente pueda participar en la planeación de los presupuestos públicos y cómo se van a invertir sus impuestos. Lo mejor es que no se podrían negociar por debajo de la mesa.
Se encierran en un cuarto ministros, gobernadores y alcaldes y deciden qué hacer con nuestro presupuesto, y los ciudadanos no pueden ni opinar ni hacer nada. El cuarto de la consulta va a acabar con la ‘mermelada’ porque va a obligar al Gobierno a hacer audiencias públicas con la ciudadanía para decidir en qué se va a gastar hasta el último peso.
El quinto mandato es buenísimo. Es para que mis compañeros los congresistas tengan que rendir cuentas de su asistencia al Congreso, que muestren cómo votan y los resultados de su gestión. Esto es muy importante, porque tienen que dejar por sentado los intereses de lobby de los que son presos y cómo votan en cada proyecto.
El sexto es para que los políticos muestren de dónde sacan la plata para hacer campaña, de dónde son sus propiedades… ¡Tienen que justificar hasta el último peso que tienen, o se les aplicará extinción a lo que no puedan justificar!
El séptimo, pero no menos importante, es que no haya más atornillados al poder. Esto quiere decir que no más ‘gerleins’ en el Senado, que llevan 40 años en un mismo cargo. No, uno sirve y se va. La idea es limitar a tres periodos el desempeño de los políticos. Si quieren trabajar más que lo hagan, pero aspirando a otra cosa.
¿Cómo se vota la consulta?
Es muy fácil. Para que sea válida, la consulta debe ser votada por más de 12 millones de colombianos, es decir, por la tercera parte del censo electoral. Por eso estamos pidiendo que voten más de 15 millones de colombianos que quieran acabar con la corrupción en el país.
Lo segundo es que para que cada punto de la iniciativa pase, debe contar con más de seis millones de votos por el ‘sí’. Usted puede votar por que se baje el salario a los congresistas, pero decir que no le parece que el presupuesto lo definan con usted. Invitamos a votar ‘sí’ por los siete puntos.
Desde ya se ven varias cadenas de desinformación y noticias falsas sobre la consulta, ¿cómo va a lidiar con eso?
Es imperativo que la gente sepa que esto no lo estoy haciendo para ganar un puesto. Ya hice campaña y ya perdí. Es mentira que lo haga para impulsar mi campaña a la Alcaldía, es mentira que alguien reciba un solo peso por hacer campaña para la consulta. Esto es por amor al arte. Es mentira que esto obedezca a un discurso Lgbti. ¡No tiene sentido! Usted vota por lo que está en el papel, no por nada más.
Llegó el momento de dejar esa indignación de redes sociales y transformarla en un voto para eliminar el flagelo que nos quita más de 50 billones de pesos al año.
Esta consulta es de todos y nos tiene que unir, más allá de Duque, Petro, Uribe.
Esto debe unirnos a toda Colombia.
