Desde hace más de dos décadas, la caleña Claudia Couper creó un método de transformación interior dirigido a víctimas de violencia sexual. En Australia se formó como analista de la cultura, comunicadora social y profesional en literatura inglesa, conocimientos que mezcló con sus estudios en psicología para convertirse en entrenadora emocional.
PUBLICIDAD
El ánimo de apoyar a otras personas en el proceso de sanación nació de su propia historia: desde los tres años fue abusada sexualmente por su padre, un pedófilo que también la maltrataba física y psicológicamente. Luego de varios años en el exterior, Claudia regresa a Cali para brindar una conferencia gratuita sobre cómo se puede iniciar un proceso de transformación interior a partir del amor.
¿En qué consiste su método ‘Yo decido ser’?
Mi propuesta es comprender que solamente desde el poder interior se puede transformar la vida. Desde hace 25 años ofrezco entrenamientos para esto y ahora los quiero compartir de forma masiva. Aunque en un inicio me enfoqué en el abuso sexual, después me abrí a todo tipo de traumas porque finalmente en el dolor no hay diferencias. Vivimos en un estado de adormecimiento y necesitamos despertar. ¿Cómo? Cambiando los pensamientos.
Su experiencia fue dolorosa… ¿logró sanarla?
Fui abusada sexualmente por mi padre por más de 17 años. Se me dificultó mucho crecer en esas circunstancias, pero de corazón logré entender que era posible salir de ese espacio tan lúgubre donde muchas personas están hoy, por eso decidí ser la voz de aquellos que sufren en silencio. Desde muy joven sentí un deseo grande de llevar un mensaje significativo que llegara a la conciencia y transformara la realidad.
También ha trabajado con niños y adolescentes, ¿son diferentes los de esta generación?
PUBLICIDAD
Creo que no hay niños difíciles sino padres desinformados. Un niño es ‘difícil’ porque tiene ese reflejo en casa, porque no se tiene una comunicación adecuada con él. Me encanta trabajar con niños y especialmente con los de ahora, que tienen una capacidad receptiva impresionante. Debemos tratarlos con respeto, entendiendo sus diferencias y valorando sus maneras de expresarse.
Cali es un punto de llegada de víctimas del conflicto armado y muchas han sufrido violencia sexual, ¿qué mensaje les podría dar?
Es simple: si yo me amo, me respeto y me valoro, voy a estar más dispuesta a amar, a respetar y a valorar a los demás. La intolerancia nace del resentimiento conmigo misma, de no entenderme, de no haber sanado mis historias de vida. Lo que hago en los entrenamientos grupales y personalizados es dar herramientas para que las personas logren iniciar este camino.
¿Qué experiencias de trabajo ha tenido con población vulnerable?
Tuve una muy bonita con un grupo de mujeres que eran madres de sicarios, prostitutas, proxenetas… una población bastante vulnerable que fue muy receptiva. Cuando a esas personas que han sido tan juzgadas y maltratadas se les da la oportunidad de cambiar, la toman a manos llenas.
¿Y su trabajo con futbolistas?
He trabajado con deportistas como Félix Noguera, Aléxis Pérez y Guillermo Celis. Creo que los futbolistas son ‘héroes populares’: tienen millones de seguidores que reciben sus mensajes. Aunque son muy disciplinados, ellos también tienen la necesidad de mejorar y saber cómo sacar lo mejor siempre. Aprenden muy rápido, para mí son ‘superhombres’.
¿Cuándo va a ser su evento en Cali?
Tendré una charla gratuita en Alópolis (Calle 5e No. 41-17), el jueves 26 de abril, a las 5:00 p. m. Podrán asistir todas las personas interesadas en conocer mi método. Estoy feliz de volver a mi ciudad, siento que desde Cali vamos a crear un cambio global.