Una familia en la ciudad inglesa de Herefordshire sufrió la pérdida de su gatito regalón luego de las inclemencias climáticas que dejó a su alrededor la «Bestia del Este» y la Tormenta Emma el pasado 26 de febrero.
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En medio de los apagones que afectaron al lugar, los Robinson buscaron por todos lados al felino llamado «Willow», pero no pasaba nada. Pegaron carteles, le avisaron a sus vecinos, pero no hubo resultado positivo.
Hasta que llegó el 8 de marzo y sus esperanzas se diluyeron: el gato estaba muerto en plena vía pública muy cerca de su hogar.
El hecho golpeó fuertemente a Josh y Buddy, los más chicos de la familia. Los menores de 7 y 4 años respectivamente estaban devastados y para tratar de ayudarlos a superar su pena, sus padres decidieron hacer un emotivo funeral al minino, para luego enterrarlo.
Los niños lloraron y los progenitores estaban preocupados por el estado de los menores, los cuales ya habían demostrado su pesar durante los días que el felino estaba desaparecido. Incluso, Josh siguió llenando el plato de Willow con comida en la entrada de la casa.
Sin embargo, dos días después pasó lo más extraño de todo: el gato apareció de imprevisto a comer y el niño vio todo desde su casa, entrando al hogar con él en brazos. Nadie entendía nada.
Caterina Robinson, la madre de los pequeños, trató de explicar todo a Fox News: «Simplemente asumimos que era (el gato)».
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«El hecho de que nuestro gato no había llegado a casa y el cuerpo de un felino estaba fuera de nuestra vivienda (nos engañó)», agregó.
Eso sí, ahora la mujer tiene otro foco de duda: ¿de quién es el animal al que le hicieron un funeral?. «Es increíble, pero obviamente tenemos el gato de otra persona enterrado en nuestro jardín. Por lo menos podemos decir que tuvo un buen entierro», remató.
