En el municipio de Gigante (Huila), un subintendente de la Policía identificado como Medardo Rivas Sierra falleció luego de que uno de los patrulleros de su estación lo atacara a disparos con el arma de dotación.
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Según fuentes de la institución, el altercado habría ocurrido cuando Rivas le llamó la atención al patrullero por haberse presentado a trabajar en estado de alicoramiento. Su respuesta no fue con palabras sino con disparos.
“Cuando el integrante del grupo llegó en estado de embriaguez a la estación de Policía fue requerido por el superior debido a su estado, algo que generó molestia al oficial quien, sin mediar palabras, utilizando su arma de dotación atacó la humanidad de los agentes que se encontraban de turno”, dijo la Policía de Neiva.
En el tiroteo también resultó herido el patrullero Weimar Javier Córdoba, quien fue trasladado de inmediato a un hospital por sus lesiones en las extremidades superiores.
Por lo pronto, el agresor se encuentra detenido tras las rejas mientras avanzan las investigaciones del caso.