Una operación de película se registró este viernes en el aeropuerto internacional Rafael Núñez de Cartagena, luego de que una pasajera de un vuelo entre Fort Lauderdale y Medellín hiciera una amenaza de bomba y obligara a cerrar las operaciones en la terminal de ‘la Heroica’.
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La emergencia inició hacia la 1 de la tarde, cuando los pilotos del vuelo NKS 237 de Spirit Airlines, que viajaba entre los aeropuertos de Fort Lauderdale (Florida) y José María Córdoba de Rionegro tuviera que aterrizar de forma no planeada.
Según la Aeronáutica Civil, una pasajera hizo una falsa amenaza de bomba, por lo que los pilotos pidieron activar la alerta roja. La respuesta del organismo fue limpiar el espacio aéreo, apartar el avión de las pistas y las zonas de embarque luego del aterrizaje, y cerrar las operaciones durante más de una hora.
Mientras tanto, fuerzas élite de la Policía Aeroportuaria y negociadores se acercaron al avión para tratar de negociar con la presunta terrorista. Cuando los tripulantes de la aeronave se dieron cuenta que la mujer no tenía ningún artefacto explosivo, los agentes de policía ingresaron, evacuaron a los pasajeros y detuvieron a quien provocó la agresión.
El Aeropuerto de Cartagena estuvo cerrado por la amenaza de bomba entre la 1 y las 2:30 de la tarde, lo que causó retrasos en algunos vuelos desde y hacia la capital de Bolívar.
