Cada que hablamos de dineros del erario público que al parecer de los ciudadanos no están para nada bien invertidos, la palabra indignación aparece en nuestra cabeza y en nuestra boca. Así fue con la consulta popular por medio de la cual se escogió al candidato liberal, en donde se gastaron 40.000 millones de pesos, o las cortinas de la Casa de Nariño… ¡En fin!
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La cuota de indignación viene por cuenta de la decoración navideña de la Casa de Nariño en donde el presidente vive con su familia y desde donde despacha.
La Presidencia de la República contrató la iluminación navideña por 223 millones, ¡cien millones más que en el 2016! Cuando costó 128, que también salieron del bolsillo de todos los colombianos, que paga estas ‘cuoticas’ con la plata de los impuestos.
La iluminación adornará todos los espacios, y es que a este paso, saldrá mejor visitar la casa de Santos, que visitar el Parque de la 93 en Bogotá, o el Parque Lleras en Medellín, pues va haber decoración hasta en los baños.
Codensa, que fue la empresa contratada por La Presidencia de la República, se ha venido embolsillando cerca de 1000 millones de pesos, en menso de cinco años. ¿Cómo le parece?
