Los castigos físicos por parte de los profesores eran permitidos en la antigüedad, pero ahora se han transformado en un tema complejo, sin importar si es que el alumno realmente se lo merece.
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Por eso, la acción cometida por una profesora de la primaria de Kengsinton, en Iowa, Estados Unidos, terminó con la educadora suspensión.
Todo comenzó hace al menos una semana cuando uno de los alumnos de Ann Margaret DeVille, se burló de su“horrible cola gorda” de la mujer de 34 años y cerca de 190 kilos de peso.
Nadie esperaba que la reacción de la profesora se transformara en algo físico pero así fue. Según relataron los propios alumnos que fueron testigos del hecho, la mujer empujó al joven al suelo, levantó su delantal y simplemente se sentó en su cabeza.
“Luego simplemente dejó escapar un peo, el más grande que haya escuchado”, dijeron los testigos.
La madre de la víctima presentó un reclamo al establecimiento por el maltrato a su hijo de 11 años, quien desde el incidente se encuentra bajo tratamiento sicológico.
En su relato, el que reproduce el sitio TheChangePost.com, la madre detalla que la profesora no llevaba ropa interior y que su hijo “pudo sentir un sabor amargo en su boca varias horas después del incidente”.
La profesora fue acusada de comportamiento inapropiado y la Junta Escolar de Des Moines, a la que corresponde el colegio decidió suspenderla durante dos semanas, aunque sin retenerle su sueldo.
