Una nueva polémica se ha desatado en los últimos días tras conocerse cuáles serían los costos de patrocinar el partido político de las Farc y con el que piensan consolidar lo que será el futuro político del sector más extremo de la izquierda colombiana. Además, del futuro de la guerrilla que entregó sus armas, que está entregando sus bienes y que ahora quiere liderar la lucha con ideas en vez de balas.
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¡Oh sorpresa! Lo que hoy parece haber salido de la cabeza de algunos pocos, y lanzado como una bomba en la mitad de la ciudad un día laboral, venía tratándose desde hace más de dos años en la elaboración de los acuerdos finales de paz.
La financiación de un partido que surja de las Farc ya estaba pactada y la cifra, que parece astronómica para muchos colombianos, fue uno de los ‘sapos’ que tuvimos que tragarnos.
Según el Ministerio de Hacienda, $232.000 millones se emplearán en la creación y sustento de la plataforma política hasta el año 2026. Pero, de inmediato, una de las partidas presupuestales de 2018, de $39.000 millones, serán la cuota inicial.
El reparo por la financiación del nuevo movimiento político se ve desde varias partes. La oposición a los acuerdos ha hecho que los colombianos pongan especial atención en los recursos de los ciudadanos que se irán para financiar el grupo beligerante.
Lo que sí es cierto es que el Acto Legislativo 3, del 23 de mayo de este año, estableció, vía fast track, que “una vez finalizado el proceso de dejación de las armas por parte de las Farc-Ep, en los términos del Acuerdo Final (…), se reconocerá de pleno derecho personería jurídica al partido o movimiento político que surja del tránsito a la actividad política legal”.
Es decir que el apoyo no es nuevo y la sorpresa por la millonada que costará financiar la participación política de las Farc viene siendo un acto que mira las cifras de la reincorporación, pero no las de la guerra.
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Los congresistas Iván Cepeda, del Polo Democrático, y Ángela Robledo, por la Alianza Verde, aseguran que la financiación electoral es totalmente más ventajosa que seguir en guerra con las Farc. Y es que según el estudio ‘Las cifras de la guerra y de la transición’, realizado por el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) y la Agencia de Comunicaciones para la Paz (Acpaz), un día de guerra en el país cuesta alrededor de $22.000 millones.
En un mes de guerra con las Farc, el país gastaría $660.000 millones, mientras que en los próximos nueve años, la financiación del nuevo partido sería de 232.000 millones de pesos. ¡Menos de la mitad de lo empleado en 30 días!
Por ahora, la cifra segura es la de las próximas elecciones parlamentarias, sin descartar que la guerrilla quiera presentarse a las presidenciales, será de cerca de $40.000 millones, pero faltan detalles técnicos que se empezaron a descubrir ayer en el congreso nacional de las Farc.
El congreso en el que se definirán como partido
Bajo el eslogan “Por un gobierno de transición para la reconciliación y la paz”, empezó ayer el congreso, en donde unos 1100 delegados pondrán las bases para la creación del partido político.
“Hay más o menos 1100 delegados de las diferentes organizaciones farianas. Habrá trabajo de comisiones como todo congreso de todo partido, no hay nada nuevo, simplemente estaremos asentando en el tema de la democracia”, aseguró alias Marcos Calarcá, miembro de las Farc.
Mientras tanto, Rodrigo Londoño, alias Timochenko, aseguró que una vez que se transformen de guerrilla a partido no cambiarán sus fundamentos ideológicos o su proyecto de sociedad: “Nos transformaremos a partir de este evento en una nueva organización exclusivamente política que ejercerá su actividad por medios legales, esto no significa que renunciemos de algún modo a nuestros fundamentos ideológicos o proyecto de sociedad”, aseguró.