Uno de los voceros del paro cívico que vive Buenaventura no se calló nada y enfrentó el nuevo ministro del Interior, Guillermo Rivera. Éste se ve en actitud de escucha y nunca responde al reclamante.
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Este sábado, los voceros del pueblo en el paro cívico se levantaron de la mesa algunas horas debido a agresiones del Esmad hacia la comunidad.
“Usted que habla de diálogos acá en El Cosmo, allá usted sabe que el Esmad está garrotiando y echándole gases a los ciudadanos de Buenaventura (…) Ministro, respete a la ciudadanía de Buenaventura, garantice los derechos. Si usted quiere de verdad diálogo, respete los derechos de la ciudadanía que está protestando”, dijo el reclamante.
Ombudsman ve cerca acuerdo ante paro cívico en puerto colombiano Buenaventura
El defensor del Pueblo de Colombia, Carlos Alfonso Negret, dijo hoy que «el camino está allanado» para conseguir un acuerdo que solucione el paro cívico que afecta hace 18 días a Buenaventura (suroeste), el principal puerto del país en el Pacífico.
El paro cívico fue convocado en Buenaventura como protesta para que el Estado atienda necesidades urgentes en lo social, económico y ecológico.
En una declaración a periodistas, Negret afirmó que el presidente Juan Manuel Santos ha transmitido en 48 horas «debe estar el paro arreglado».
En este sentido, saludó la reunión de este viernes del procurador y mediador, Fernando Carrillo, con los dirigentes del paro cívico.
Negret también informó que la Defensoría del Pueblo «ha venido atendiendo desde el primer día» el caso porque nunca han dejado Buenaventura.
En estos días de paro han atendido 91 quejas, de las cuales 39 han sido transferidas a la Fiscalía y Procuraduría (Ministerio Público) «para los temas que tienen que ver con lo penal y disciplinario».
Destacó que ya advirtieron al Gobierno en dos reuniones «de alto nivel» que la comunidad quería que el Ejecutivo acudiera a Buenaventura, este no asistió «y el paro se dio, tanto en Quibdó como en Buenaventura«.
En referencia a la actuación del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de la Policía, criticó el uso «desmedido de la violencia contra niños, niñas o cualquier ciudadano», si bien condenó «los destrozos inimaginables en bienes privados» causados por los manifestantes.
La comunidad convocó el paro para exigir que se restablezca el servicio en el hospital de Buenaventura, mejoras en la seguridad y solución a la problemática del agua potable en esta ciudad.
