Las imágenes de las cámaras de seguridad muestran el momento en el que es asesinado el hermano del líder norcoreano Kim Jong-un en el aeropuerto de Malasia.
PUBLICIDAD
Se le acerca una mujer y le cubre la cara con un trapo, se cree, que impregnado de veneno. Ella, una agente secreta con pasaporte vietnamita, conocida como Miss Veneno, es detenida poco después.
Poco más de dos segundos bastan para acabar con su vida. Pero no está sola. Desde otra cámara de seguridad se ve cómo cuenta con la ayuda de otra mujer con pasaporte indonesio y también detenida. Cada una huye en una dirección mientras nadie a su alrededor parece darse cuenta de lo que acaba de ocurrir, ni siquiera el propio afectado.
Con total tranquilidad, tras hablar con el personal de la terminal y la policía, Kim Jong-nam acude a la clínica del aeropuerto y minutos más tarde muere de camino al hospital. Además de las dos mujeres hay otros dos detenidos por su muerte planeada por el propio Kim Jong-un, según los servicios de inteligencia surcoreanos, por su rechazo al régimen.
