Fabio Di Lello, jugador y panadero de 32 años, asesinó a sangre fría a un joven de 22 años a la salida de un bar en Vasto, en la región italiana de Abruzzo. ¿La razón? Italo D’Elisa un joven de 22 años atropelló y mató a la esposa del jugador meses atrás.
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Lo que los medios italianos titulan como «vendetta» se planeó por cerca de siete meses, luego de que el joven le quitará la vida a Roberta Smargiassi y no hubiese reparación judicial.
Di Lello esperó a su víctima a la salida de un bar y le propino cuatro disparos que acabaron con la vida del hombre. Luego del hecho, le coment{o a un amigo cercano, se dirigió al cementerio y dejó el arma encima de la tumba de su difunta esposa, en señal de justicia por la propia mano.
Según Infobae, para Fabio Di Lello, «el dolor se transformó en obsesión». El jugador aseguraba que no había justicia para su amada esposa y por eso decidió actuar por cuenta propia: «Me robaron a mi Roberta, robaron sus sueños, sus proyectos de vida, robaron su deseo de ser madre, le robaron mi amor, sus amigos, su amor por la vida, su sonrisa, se la robaron a sus padres, a todos nosotros», escribió en un diario local, junto al anuncio de una misa en su recuerdo.
Lo que sucedió bien pudo haberse prevenido. En redes sociales, Di Lello colocó como foto de portada una imagen alusiva a la película El Gladiador, en donde un hombre busca venganza por la muerte de sus seres queridos, acompañado de un «Justicia para Roberta», que nunca llegó, luego de saber que el causante del accidente, cruzó la luz del semáforo en rojo.