Una jueza boliviana envió a prisión al exdirector de Registro Aeronáutico Nacional de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) Gustavo Vargas Villegas, quien es además hijo del director general de Lamia, dentro de las investigaciones por el accidente del avión de esa aerolínea en Colombia.
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En una audiencia cautelar en La Paz, la jueza Claudia Castro dispuso anoche la detención preventiva de Vargas Villegas en el penal paceño de San Pedro, informó hoy la Fiscalía General del Estado en un comunicado.
El exfuncionario de la DGAC fue acusado por los supuestos delitos de «uso indebido de influencias, negociaciones incompatibles con el ejercicio de funciones públicas, e incumplimiento de deberes», dijo el fiscal de Distrito de La Paz, Edwin Blanco.
El padre de Vargas Villegas, Gustavo Vargas Gamboa, también está detenido preventivamente en una cárcel en Santa Cruz (este), dentro de las investigaciones por el accidente del avión de Lamia que se estrelló el pasado 28 de noviembre cerca de Medellín, Colombia.
En el accidente murieron 71 de 77 pasajeros, entre ellos casi toda la plantilla del club brasileño Chapecoense.
Siendo director de Registro Aeronáutico Nacional, Vargas Villegas autorizó en 2014 la importación y matrícula provisional del avión de Lamia, explicó el fiscal del caso, Daniel Ayala.
Se le acusa de uso indebido de influencias y de negociaciones incompatibles con el ejercicio de funciones públicas por su vínculo familiar con el director general de Lamia.
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«Sobre la comisión del delito de incumplimiento de deberes, el imputado no se excusó del conocimiento del asunto mediante resolución motivada, dando vía libre al tramite realizado por su padre en representación de Lamia», añadió Ayala.
El Ministerio Público también informó que imputó formalmente a la exfuncionaria de la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea (AASANA) Celia Castedo, quien observó irregularidades en el plan de vuelo de la aeronave de Lamia en el aeropuerto cruceño de Viru Viru.
También fue imputado el director de Operaciones de Lamia, Marco Antonio Rocha Venegas.
Rocha fue acusado por «desastres en medios de transporte, homicidio culposo y lesiones gravísimas» y Castedo está imputada por los mismos delitos, además de «incumplimiento de deberes y uso indebido de influencias», señaló la directora nacional Anticorrupción de la Fiscalía, Fanny Alfaro.
La Fiscalía solicitó que ambos sean declarados «en rebeldía».
Castedo, quien pidió refugio en Brasil, denunció en una carta difundida el jueves que fue objeto de presiones de sus superiores en AASANA para cambiar el contenido del informe con observaciones al plan de vuelo de Lamia.
La técnica presentó cinco observaciones al plan de vuelo y las reportó en tres ocasiones a la compañía aeronáutica, la primera dos horas antes del despegue y la última veinte minutos antes.
Castedo aseguró que avisó a la aerolínea de los problemas del plan de vuelo porque ellos eran los responsables de corregirlas, pero no queda claro si alertó de los problemas detectados a sus superiores de AASANA antes de que el vuelo despegara.
Rocha está fuera del país desde el pasado 21 de noviembre, cuando viajó a Paraguay, según un reporte de la Dirección de Migración conocido en los últimos días.
