Por: Martha Ordóñez / Consejera Presidencial para la Equidad de la Mujer
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En el marco de la conmemoración hoy, 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, tenemos que reconocer que aún nos falta camino por recorrer para lograr superar este flagelo que impactan de manera tan profunda la vida de las mujeres.
Ya han transcurrido casi 35 años desde la ratificación del primer tratado que suscribió el Gobierno colombiano para eliminar este tipo de violencias; es evidente que hemos avanzado, contamos con una normatividad jurídica extensa en materia de protección y garantía de derechos para las mujeres, existen políticas públicas, planes de igualdad de oportunidades, mecanismos de género, puesta en marcha de acciones de transversalidad del enfoque de género, inclusiones y análisis desde los presupuestos con enfoque de género, entre otras estrategias. Sin embargo, aún esto no se ha traducido en garantías plenas para que las mujeres del país tengan una vida libre de violencias.
No existe justificación para que cada tres días en Colombia una mujer muera a manos de su pareja o expareja, entre otros tipos de violencias, en este sentido, desde la Consejería Presidencial para la Equidad de la mujer, consideramos la conmemoración del 25 de Noviembre como un momento estratégico para fortalecer nuestros esfuerzos en la generación de una transformación cultural, que permita desnaturalizar las violencias contra las mujeres.
De esta manera, la Consejería, en articulación con Función Pública y la Unidad para las Víctimas (Uariv), hemos diseñado la campaña ‘Me Comprometo’ que tiene por objetivo vincular servidoras y servidores públicos como garantes de los derechos de las mujeres, para promover la cero tolerancia hacia las violencias, la debida diligencia ante estos hechos, pero sobre todo, el trato digno que debemos brindar a las mujeres ante cualquier acto de violencia.
Reafirmamos a través de esta campaña que estamos al servicio de las mujeres para la garantía y protección de sus derechos, y hoy nos queremos comprometer con esta labor, para avanzar hacia el logro de una sociedad equitativa, justa y respetuosa de las mujeres, en la que sea posible la paz estable y duradera por la que tanto hemos trabajado.