La escandalosa cifra, que supera las registradas en los países del Cono Sur durante el periodo de las dictaduras militares, fue revelada por el informe «Hasta encontrarlos. El drama de la desaparición forzada en Colombia«, el más completo estudio hecho en en el país sobre este flagelo que creció como espuma con el conflicto armado.
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«La desaparición forzada ha sido un crimen silencioso e invisibilizado, que genera un duelo infinito, suspendido, en los familiares de quienes la padecen, sumiéndolos en un dolor que no se alivia y una espera interminable», señala el estudio.
Según el documento de 426 páginas, la desaparición forzada en Colombia se ha realizado con tres objetivos: «castigar, generar terror y ocultar los crímenes».
Los mayores responsables de este crimen de lesa humanidad han sido paramilitares y guerrilleros, así como agentes del Estado, organizaciones criminales no identificadas y grupos posdesmovilización que surgieron en 2005 después del proceso de paz con las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
En promedio cada día de los últimos 45 años tres personas fueron desaparecidas en el país, lo que significa un caso cada ocho horas.
Uno de los períodos más críticos es el comprendido entre los años 1996 y 2005, cuando estaban en su auge los paramilitares y una persona era desaparecida cada dos horas y media en el país, según el informe.
«Llevo 1.107 noches pensando en 1.107 muertes diferentes de mi hijo», señala el testimonio de un familiar de un desaparecido citado en el informe, cuya identidad no se revela.
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