La mañana del viernes un tren se descarriló en la localidad de Eseka, Camerún quitando la vida a 50 personas. Según medios locales, luego de que la carretera que unía a Yaoundé de la ciudad portuaria de Duala se derrumbara a causa de las lluvias, el sistema ferio decidió añadir ocho vagones al tren siniestrado pasando de 600 pasajeros a 1300. Aún se desconoce si eso fue lo que provocó el accidente, sin embargo, los vagones más dañados fueron los últimos en agregarse al convoy. Reuters.
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