En la ciudad de Zhaoquing, al sudeste de China, un testigo grabó la golpiza que efectivos policiales propinaron a un grupo de residentes durante una protesta en contra de la construcción de un incinerador de basura. Algunos pobladores, según declaraciones en el diario chino «The China Daily», están preocupados por la posible contaminación ambiental que pueda producir el incinerador, asegurando que el gobierno local niega que esto pueda suceder.
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