Los cultivadores del Catatumbo planean protestas y marchas, y no descartan un nuevo paro agrario por esta medida que propone la nueva lucha antidroga.
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Según los campesinos, pensar en extraditar a las personas que cultivan hoja de coca no soluciona en nada el problema del narcotráfico.
«La política antidroga vuelve a caer en un error. Siempre se quiere afectar al más vulnerable, al que le ha tocado sembrar coca por el abandono social del Estado”, dice el vocero de los campesinos de esta zona.
Por eso, ellos proponen mayor participación del Estado, inversión y nuevos proyectos para el campo colombiano.
Cifras: En el Catatumbo hay cerca de 69 mil familias que se dedican al cultivo de coca porque no tienen otra opción de sustento.
