Si piensa en su día a día, calcula el número de vasos de café desechables e incluso en la cantidad de agua que consume mientras se ducha o lava los platos, y suma todo en un consecutivo de actividades que desarrolla a diario por su estilo de vida, se dará cuenta de que el comportamiento que adopta frente a cada situación se refleja en la huella ambiental que deja en el planeta.
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Por esta razón, se ha convertido en una necesidad el desarrollo de planes o proyectos que generen un estilo de vida sostenible. Para hablar sobre este tema, PUBLIMETRO dialogó con Diana Carolina Páez, docente investigador de Ingeniería Ambiental de la Universidad El Bosque, quien manifestó: “Cada decisión que tomamos diariamente, con respecto a las compras o servicios, tienen un impacto ambiental en el planeta”.
Así mismo, destacó la importancia de buscar opciones en la ciudad, como por ejemplo, la bicicleta. Con este medio de transporte alternativo puede llegar a ahorrarse más de $100.000 al mes, o más de $1.200.000 en un año.
De hecho, según una investigación del proyecto de Estilos de Vida Sostenibles de la Universidad El Bosque reveló que en promedio una persona de Bogotá que usa SITP deja una huella de carbono de 52 kilogramos de CO2 al año, mientras que alguien que usa Transmilenio deja una huella de carbono de 14,98 kilogramos de CO2 al año.
Eso quiere decir que usando la bicicleta se tiene la oportunidad de reducir decenas de kilos de CO2 del aire de la capital. Todo con el fin de tener un estilo de vida más sostenible y aportar positivamente a disminuir la huella ambiental. “El propósito no es consumir menos, es consumir mejor”, apuntó Páez.
Para lograr que estas estrategias sean exitosas, el proyecto de Estilos de Vida Sostenibles liderado por el pregrado en Ingeniería Ambiental de la Universidad El Bosque, se basó en el marco estructurado de investigación desarrollado por Akenji y Chen en el 2016, el cual fue avalado por ONU Medio Ambiente, identificó que los factores esenciales para formar un estilo de vida ambientalmente responsable en un individuo son:
El primer factor es el individual, sigue colectivos y, la base que habilita el cambio es el externo. Este último propicia las condiciones del entorno para que cada persona tome decisiones al momento de suplir sus necesidades básicas así como sociales, culturales, educativas, tecnológicas, con las herramientas necesarias y en la colectividad, ya que la sociedad determina la facilidad de propagación de las acciones sostenibles.
Por último, la situación económica, geopolítica y la capacidad de innovación pueden aportar a un estilo de vida sostenible. En este caso, la oferta y la demanda determinan el uso responsable de los productos. Por ejemplo, hoy en día existen los carros eléctricos que facilitan la movilidad pero que lo hace de una forma más responsable con el medio ambiente.
De esta manera los ingenieros ambientales pueden diseñar soluciones integrales a problemas complejos. Así mismo, logran sensibilizar a las personas para cambiar sus hábitos, con lo cual se beneficia inmediatamente el planeta.