El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, tuvo su primera conferencia oficial de medios en la Casa Blanca, en la que tocó el tema obligado de la migración, la crisis en la frontera y los menores de edad no acompañados.
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El mandatario continúa con la idea de amparar a este último grupo, muchos de los cuales se encuentran varados en la delimitación entre México y el país de las barras y las estrellas.
El líder de los demócratas no dudó en sostener que no deportará a Menores No Acompañados (UAC) que son detenidos en la frontera, cuando intentaban ingresar como indocumentados a territorio estadounidense.
“No permitiré que mueran de hambre en la frontera”, dijo sobre los pequeños y jóvenes, aunque muchos están en situaciones deplorables en estos momentos.
«Es un problema serio, pero no es crisis en la frontera»
Fueron varios minutos los que le tomó a Biden responder las cuestiones de los periodistas sobre el incremento de la inmigración en la frontera, la primera crisis de su gestión. Sin embargo, hasta ahora, la administración del presidente sólo se refiere a ese fenómeno como “un problema serio”.
Aunque, Biden reconoció un aumento significativo en el número de personas de México y Centroamérica que llegan a la frontera sur, descartó que el incrementó se deba a su política migratoria.
Cabe destacar que el líder de los demócratas se ha basado en la reversión de las medidas implementadas en los últimos cuatros años por su predecesor Donald Trump, además de enfocarse en el debido proceso migratorio.
Suma de factores lleva a miles a la frontera
Con poco más de dos meses de haber arribado a la Casa Blanca, el presidente indicó que en estos momentos existe “un aumento significativo del número de personas que llegan a la frontera en los meses de invierno (enero, febrero y marzo), debido a que los migrantes pueden viajar con menor probabilidad de morir en el camino, debido al calor del desierto”.
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Son muchos los activistas que reconocen las intenciones del mandatario de Estados Unidos; sin embargo, también aseguran que la administración se ha visto rebasada por un problema que no se veía en los últimos cinco años.
Los mismos activistas reconocen que al término del verano y comienzo de la primavera se puede apreciar un aumento en el número de intento de cruces de indocumentados, pero que este año en particular han aumentado por diversos factores.
El azote de dos huracanes en América Central a finales del año pasado causando pobreza, la pandemia del coronavirus y las promesas de Joe Biden de respetar los derechos humanos de los migrantes, sobre todo, a los menores han ocasionado el exponencial incremento en la frontera.
De hecho, el mandatario reconoció que la situación en la frontera no estaba mejorando en estos momentos, pero prometió que “lo hará rápidamente”.
Sostuvo que “pronto vamos a escuchar que mucha gente se va a estar yendo de las instalaciones de la Patrulla Fronteriza, o bien con familiares o bajo el cuidado del Departamento de Salud y Recursos Humanos (HHS)”.
Va por 200 millones de vacunados en 100 días
En otro tema, el presidente de Estados Unidos aseguró que después de alcanzar la meta de vacunar a 100 millones de personas antes de sus primeros 100 días en la Casa Blanca, ahora se han puesto el objetivo de duplicar la cifra.
«Sé que es ambicioso, es el doble de nuestro objetivo original, pero ningún otro país del mundo se ha acercado a lo que estamos haciendo», indicó el líder de los demócratas.
Además, mencionó que hará una inversión de 100 millones de billetes verdes en las comunidades que se han visto más afectadas por la pandemia del COVID-19.
También resaltó que casi la mitad de las escuelas del país se encuentran abiertas cinco días a la semana, para que los niños y jóvenes tengan aprendizaje presencial.
