El 13 de marzo pasado un horrible caso impactó a toda España; luego del asesinato de dos niños en la localidad valenciana de Godella.
PUBLICIDAD
Tras ser detenida, la mujer llevó a la policía al lugar en el que había enterrado los cuerpos de sus hijos de 5 años y seis meses, señala ABC.
María Gombau tenía antecedentes de problemas mentales. Por eso fue trasladada a un hospital valenciano, luego de que los uniformados dieron con la ubicación de los restos.
Según determinaron las «cuatro exploraciones psiquiátricas» que evaluaron su estado; y que fueron dadas a conocer en las últimas horas. La mujer “sufrió un brote psicótico en el momento de los hechos”, asegura El País.
El informe apunta la forma en la que habría matado a los niños. Esta fue “por asfixia, con una almohada y en el agua; y después ‘cree haberles apedreado’”.
Aunque todos los indicios muestran que Gombau es la autora, aún no se ha llegado a “una conclusión rotunda”. Por eso sigue en calidad de presunta asesina. Además, la autopsia reveló que los pequeños fallecieron por golpes y no por asfixia; y en los días posteriores a su detención hablaba como si los menores siguieran vivos.
En la declaración que entregó la mujer, aseguró que la muerte de sus hijos “era la única forma de salvar sus almas y salvarme yo misma”.
PUBLICIDAD
“Me da mucha pena la muerte de los pequeños, pero es que habían perdido su alma, no eran mis hijos. Es la voluntad de Dios y yo estoy tranquila”, agregó.
En el relato de los hechos, que reproduce 20 Minutos y que fueron entregados en su totalidad por el programa Espejo Público, dijo que a uno de sus hijos le “habían robado el alma” tras matricularlo en la escuela y que para una madre como ella eso había sido “fácil de detectar”.
“Estaba más violento, más agresivo, se enfrentaba a mí, pero lo peor fue cuando me percaté de que a pesar de su edad era capaz de controlar mi voluntad, hacía conmigo lo que quería”, afirmó.