Los forenses practicarán la autopsia al cadáver, y los agentes declararán en un Juzgado de Cáceres, encargado del caso, posiblemente antes del lunes, dijo hoy a Efe el representante del Gobierno en la región José Carlos Bote.
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El preso huyó al descender de un furgón policial cuando iba a declarar en los juzgados, momento en el que tiró las muletas -no iba esposado- y agredió a un agente.
Murió en el Hospital San Pedro de Alcántara de la ciudad, adonde fue trasladado en estado «crítico» con una herida de bala en el tórax, que recibió tras ser localizado por el dispositivo de búsqueda, en el que también participaron la Guardia Civil y la Policía Local.
El representante gubernamental no pudo confirmar que el fallecido fuera armado, pero sí aseguró que no hubo tiroteo.
Insistió en que se avisó a los agentes de que extremaran las precauciones, ya que el huido era muy peligroso, y que se hicieron varios disparos. «Supongo que de advertencia», manifestó Bote.
Tampoco confirmó que el preso perteneciera a la banda supuestamente dedicada al robo de joyerías cuyos miembros fueron detenidos en enero en Cáceres.
Su familia, residente en Huelva , fue informada de lo sucedido y se iba a desplazar a Cáceres, según Bote.
El fallecido tenía residencia habitual en Huelva, pero estaba «transitoriamente» en Cáceres.
