Las investigaciones de la Policía de Nueva York tras hallar un cuerpo desmembrado en el canal Red Hook la semana pasada arrojó como resultado que pertenecíaa a Jeniffer Londoño, una joven pereirana de 31 años que vivía en Nueva Jersey con su novio.
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La mujer fue vista por última vez cerrando el bar Luna Lounge, del cual era administradora, y en un principio se encontró una parte de su cuerpo con un mensaje en sánscrito que fue fundamental para establecer su identidad.
Se cree que el principal sospechoso del crimen es su novio ya que se encontraron rastros de sangre en el apartamento donde residían. Tras conocerse la noticia de su muerte, muchos allegados y demás personas se acercaron al bar para rendirle un homenaje. Sus amigos piden justicia: