Las principales fuentes de energía que utilizamos son de origen fósil, incluyendo carbón, petróleo y gas. Esas satisfacen alrededor del 80 por ciento del consumo total. La energía renovable, incluyendo la energía eólica, solar, hidroeléctrica, etc., sirve para el otro 20 por ciento.
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Los informes sugieren que la humanidad está utilizando actualmente más de un millón de terajoules de energía por día. Esto podría compararse con una producción de tres mil veces de las mayores centrales nucleares del mundo funcionando a plena capacidad. Y el hambre de energía sólo está aumentando.
«Los mayores retos son las demandas crecientes tanto de los países en desarrollo y de nuevos tipos de cargas, como la carga de vehículos eléctricos, así como la forma de satisfacerlos en la manera aceptable para medio ambiente”, dice Valentin Robu, profesor asistente de la Universidad Heriot-Watt de Reino Unido.
Se espera que la mayor parte de esta nueva demanda venga de los países en desarrollo. Por ejemplo, si sólo una fracción de las personas que viven actualmente en regiones del sudeste de Asia, India o África esperan el mismo nivel de aire acondicionado en sus hogares que en lugares de EEUU o algunos países ricos en Medio Oriente, la demanda podría rápidamente convertirse en insostenible.
«En algunos de estos países, aunque el progreso existe, la red de energía es débil o inexistente, incluso para cargas básicas como aparatos eléctricos o la refrigeración de comida y medicina. La clave es administrar este aumento de la demanda y desarrollar nuevas soluciones tecnológicas que, por ejemplo, permitirían el enfriamiento a gran escala de manera más eficiente que cualquier vivienda que compre una unidad de aire acondicionado «, agregó Robu.
Otro problema de la generación de energía que ya estamos enfrentando es la contaminación. Emisión de grandes cantidades de CO2 en la atmósfera lleva al calentamiento global. Los expertos creen que la “descarbonización” del transporte es una de las mayores preocupaciones. La gasolina es el combustible más conveniente y es difícil reemplazarlo. Una manera de hacerlo podría ser a través de coches eléctricos, sin embargo, siguen siendo bastante caros y no se puede conducir largas distancias usando una batería.
Además, una reducción significativa en consumo de petróleo podría ser gracias al amplio uso de automóviles sin conductor. No sólo serán más eficientes sino que, naturalmente, también estaremos más propensos a compartir el coche, reduciendo así el consumo de automóviles y el consumo de combustible.
«Debemos mantener el equilibrio de diferentes fuentes de energía, pero las renovables deben de tomar el lugar mas importante,” dice Janusz Bialek, director del Centro de Sistemas de Energía de Skoltech con sede en Rusia.
El proceso hacia la solución de problemas de energía ya empezó. Los expertos creen que en 10-20 años algunas de las tecnologías de almacenamiento se convertirán en rentables. Para 2020, la Unión Europea tiene como objetivo la instalación de 500 millones de medidores inteligentes en los hogares para controlar el consumo de energía. Esto ayudará con la gestión de la demanda y reducirá la cantidad de energía consumida.
Las tendencias actuales sugieren que en el futuro probablemente recurriremos a fuentes de energía más respetuosas hacia el medio ambiente para evitar los desastres masivos que los científicos están prediciendo si no nos apartamos del hábito de ocupar combustibles fósiles.
«Creo que el principal cambio en el consumo de energía será el aumento de la electrificación debido al uso más amplio de los coches eléctricos», concluyó Bialek. «Conseguimos aterrizar en la Luna hace casi 50 años usando computadoras que eran menos poderosas que las calculadoras simples de hoy. Así que estoy seguro de que conseguiremos desarrollar tecnologías para enfrentar los desafíos energéticos».
5 Recursos energéticos más populares que usamos
Publimetro habló con Janusz Bialek, director del Centro de Sistemas de Energía de Skoltech con sede en Rusia, para saber más sobre nuestras preferencias energéticas.
- Petróleo: «Tiene la mayor densidad de energía por lo que es más conveniente: se puede conducir con un tanque lleno unos pocos cientos de kilómetros. Pero las reservas de petróleo se concentran en sólo unas pocas regiones, lo que trae preocupaciones sobre la seguridad del suministro y el costo. También es muy contaminante».
- Carbón:»También produce bastante energía (aunque menos que petróleo), pero es menos conveniente de usar. Las reservas de carbón se distribuyen más equitativamente alrededor del mundo, de ahí proviene su amplio uso. Sin embargo, la quema de carbón produce emisiones nocivas significativas tanto para la salud como para el medio ambiente».
- Gas natural: «Las reservas, al igual que las del petróleo, también se concentran en pocas regiones (pero más común que el petróleo). El gas natural es «más limpio» que el petróleo y mucho más limpio que el carbón. Sin embargo, es menos conveniente, ya que produce menos energía, a menos que sea licuado. Pero eso aumenta el costo».
- Energía hidroeléctrica: «Es una de más favorables al medio ambiente, a menos que algo va mal. Sin embargo, ese tipo de energía se limita a los países con montañas o ríos grandes».
- Energía nuclear: “Tiene enormes problemas con la aceptación del público y se están cerrando plantas en muchos países. Por ejemplo, en Japón y Alemania.»