Las autoridades lograron dar con la ubicación del improvisado laboratorio donde se hallaron 170 mil pastas adulteradas para combatir el colesterol denominado Lipitor.
Tras el análisis que realizaron los investigadores, se determinó que el los supuestos medicamentos estaban elaborados con base en polvo de ladrillo, cemento y harina. “El material incautado, tras análisis de expertos, contenía cemento blanco, harina, y polvo de ladrillo que al ser consumidos producían diarrea, problemas estomacales, mareos y hasta podrían ocasionar la muerte de aquellos que lo consumían” manifestó el Coronel Óscar Pinzón, comandante operativo de la Mebog.
El oficial también aseguró que la mercancía estaba avaluada en 3 mil millones de pesos y una parte de la producción se iba a comercializar en droguerías del sur en la capital mientras que otra parte iba a ser enviada al sur del país y a en farmacias del Ecuador.
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