‘Lo excepcional’, ‘lo bueno’ y ‘lo no tan bueno’ del realme Watch S

Cuando llega el momento de comprar un teléfono nuevo, muchas son las características que se tienen en cuenta, por ejemplo, el sistema operativo. Algo similar sucede cuando se trata de relojes inteligentes, aunque su mejor opción dependerá del teléfono que use.

Además al momento de tomar una decisión, entran a consideración las opciones y funcionalidades que todos los relojes ofrecen en el mercado actual.

La ventaja de estos relojes no es solo el poder estar todo el tiempo conectado, también es posible mejorar la salud de forma significativa. Esto gracias a que la mayoría incorporan funciones de monitoreo de la salud como pulso cardiaco o presión arterial.

Toda esta información puede ser útil para monitorear la salud de modo qué, si se siente mal, puede verificar que todo esté bien a través de esta información. Y no solo eso, también podrá monitorear otros factores como el sueño midiendo así cuántas horas, y de qué calidad, tiene de sueño cada día.

Por otro lado, este tipo de dispositivos inteligentes pueden ejecutar una amplia variedad de aplicaciones, incluidos los populares servicios de seguimiento del estado físico. Si valora el soporte multiplataforma y multidispositivo, un reloj inteligente suele ser la mejor opción.

Nos dimos a la tarea de probar el realme Watch S uno de los dispositivos centrales del ecosistema inteligente de la compañía y acá les dejamos nuestras impresiones.

‘Lo excepcional’

Si hay algo hoy en día que se debe valorar en este tipo de gadgets es la autonomía. Este, tiene en su interior una batería de 390 mAh que tiene un buen rendimiento, en la prueba fue posible ver que no tiene ningún problema en ofrecer hasta 10 días de batería haciendo un uso normal, con la monitorización de frecuencia cardíaca siempre activada y teniendo activadas algunas funciones adicionales. Además tarda en cargarse por completo alrededor de dos horas.

Otro aspecto a destacar en este campo es su diseño, este smartwatch tiene un estilo de reloj convencional lo que lo hace llamativo para muchos que aunque den el salto a lo tecnológico no dejan de lado el estilo; es un reloj bastante ligero, pesa solo 48 gramos y de grueso tiene 12 milímetros, además está rodeado por un marco con minutero. En el lado derecho tiene dos botones, el de arriba sirve para activar el reloj aunque también se puede hacer con el movimiento de la muñeca y para acceder al menú de aplicaciones, mientras que el de abajo sirve para ir directamente a los 14 modos deportivos con los que cuenta.

El plus en el diseño lo tiene en el acabado que es en aluminio, lo que permite que el peso no sea un problema.

‘Lo bueno’

El equipo integra en la contratapa una serie de sensores para registrar la data, en la prueba pudimos ver que se comportan de manera muy precisa. Además de los pines, tiene el medidor de oxígeno en la sangre al lado derecho, mientras que los demás se usan para el ritmo cardíaco. Este reloj también es capaz de cuantificar, tanto las horas de sueño, los pasos, como la actividad cardiaca (el oxígeno en sangre), es importante aclarar que este último debe hacerse de forma manual.

Otro de los puntos a mencionar es que cuenta con catorce aplicaciones como alarma, registro de ejercicios, actividades, clima, ritmo cardíaco, meditación, control de la música, oxímetro, búsqueda de smartphone y hasta disparador remoto de cámara, entre otros.

Además como punto adicional, hay que destacar que la interfaz en este reloj sí está traducid0 al castellano y la app Realme Link funciona correctamente en cualquier smartphone Android.

‘Lo no tan bueno’

El reloj tiene algunos aspectos de mejora, en cuanto a la pantalla, los tonos oscuros se tornan grises aunque hay que decir que a la luz del día no hay problemas para ver el contenido. Tampoco cuenta con micrófono ni altavoz integrado.

FICHA TÉCNICA

PRECIO

El valor de este reloj es de $659.900