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“Vivimos Pacíficamente”: La marca que reinventó el posconflicto

En la Colombia del postconflicto, muchos quieren dejar la violencia del pasado atrás y crear moda.

Muchos colombianos, de manera directa o indirecta, sufrieron las consecuencias del más largo conflicto armado que su país haya tenido. Muchos perdieron su familia, otros sufrieron abusos, otros perdieron sus posesiones. Pero muchos de ellos han escogido salir adelante.

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Por esta razón, el proyecto “Vivimos Pacíficamente” concentra a 40 empresarios que han sido víctimas del conflicto pero que a su vez han salido de su zona de confort al crear productos contemporáneos, accesibles y con diseño. De la mano del Programa Inclusión en los Mercados (PROIM), que lideran los ministerios de Comercio, Industria y Turismo y con co-creación del diseñador Juan Pablo Socarrás, han creado una gama de productos accesibles para un público ávido de moda rápida, accesible y de buen precio.

 

 

“Seleccionamos a personas que ya tuvieran una cadena de producción y que de hecho tienen grandes historias de vida. Estas, junto con Juan Pablo Socarrás crearon productos que los llevaran a innovar en la cadena productiva. Después de la pasarela, con apoyo de Inexmoda, seguiremos con esta asistencia técnica y capacitación para consolidar la marca. Juan también invitó a 10 diseñadores jóvenes para que se unan al proyecto y puedan colaborar en el proceso de producción con los emprendedores”, señala a METRO la gerente de Propaís, María Lucía Castrillón.

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Así se llama la colección que lanzó oficialmente al público la marca en Colombiamoda 2017, ya que se había presentado en noviembre pasado. Juan Pablo Socarrás es conocido dentro y fuera de su país por trabajar con comunidades artesanales y aplicar las técnicas tradicionales en sus diseños. Por eso, cada colección cuenta una historia inspirada en sus aprendizajes. En este caso, y con tintes garcíamarquianos que muestran el Caribe evocador que el escritor colombiano plasmó en sus obras. Personajes como sus cuatro tías abuelas, el general y el telegrafista se mezclan con el folclor vallenato, las ciénagas y el mar. Todo esto, plasmado en piezas evocadoras, llenas de folclorismo de tintes contemporáneos y también, que plasman el ensueño del Caribe mágico que creó Gabo a través de las gamas del blanco, negro y gris.

 

Por supuesto, la marca le apuesta a otra cosa: básicos con diseño, estampados y mensajes de paz. Prendas accesibles y poderosas que generan identificación. Y eso busca el proyecto:  “Ellos son empresarios.En algún momento fueron víctimas, como lo fuimos todos, pero ahora son empresarios”, afirma Juan Pablo Socarrás, quien lleva desde el año pasado haciendo migas con la marca y ahora es su primer diseñador. “Es lo más bonito que he hecho porque me dan la oportunidad de trabajar con poblaciones, que es lo que más me gusta y también viajar, enseñar y aprender de ellos”, narra. “ (Los empresarios) Hacen unos artículos bellísimos, por eso, lo único que haremos será una articulación para hacer una línea comercial rentable en el mercado”, explica el diseñador costeño.

 

El proyecto va más allá de la pasarela y es el inicio de una serie de co-creaciones y colaboraciones con diseñadores y marcas colombianos de renombre para mejorar su producto y dar su conocimiento para volver a crear empresa luego del conflicto. Asimismo, en cada región de Colombia, los empresarios se van a especializar en su fuerte. “Tenemos un país en el que podemos mostrarle al mundo que una camiseta está hecha en Medellín pero que la podemos comprar en cualquier lado y en Vivimos Pacíficamente. Todos sumamos una gran marca país”.

 

-La expectativa está en que colección completa esté lista para venderse  a finales de agosto.

-La precooperativa se conformó por 70 empresas de todo el país.

-La colección ya se vende desde Colombiamoda 2017

-La marca contará con piezas como black dénim, estampados, mantas, chaquetas y hasta smoking femenino.

-El proyecto cubre por ahora a seis departamentos.

-Hay otras marcas que han apostado por ayudar a víctimas y participantes del conflicto en proyectos de moda. Uno de ellos es “Paloma & Angostura”, que comenzó a tener relevancia desde 2015 al usar a personas reinsertadas para fabricar prendas. Asimismo, la diseñadora Cleiner Cabadías, desplazada de la violencia en el lejano y olvidado departamento del Chocó, ha sido una diseñadora reconocida en el país por su propuesta.

 

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