Para muchos colombianos, el Nissan Sentra es el pequeño sedán cuadriculado que desde 1992 se vende en Latinoamérica como una solución básica de transporte. Fabricado todavía en México, su modelo de automóvil confiable y económico convirtió a la marca japonesa en una de las más vendidas y más comunes en las calles, un lugar que todavía ostenta.
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A pesar de esto, la plataforma creció a tal punto que la nueva versión lanzada hace pocos meses se cataloga como un sedán familiar, el cual en Colombia se ha convertido en un auto de características de comodidad y tecnología, apto para los padres de familias crecientes que quieren una solución elegante con la confiabilidad característica de Nissan.
La nueva versión del Nissan Sentra llega desde México con unas condiciones renovadas. Su frente y cola fueron renovados para acomodarse a la nueva cara corporativa, vista ya en vehículos como las camionetas NP300 Frontier y la SUV Qashqai, con elementos trapezoidales en la parrilla que se incorporan al capó.
Otro elemento renovado es las luces en forma de boomerang, que en su versión full equipo cuentan con elementos LED. Ofrecen un haz de luz poderoso en carretera, aunque a veces se pierde su foco visual en calles mal iluminadas como las que abundan en las ciudades del país.
Transmisión variable
Aunque el Sentra es un vehículo que no tiene avances de última tecnología en sus motores, su caja automática es una de las pocas posibilidades de ver en acción en Colombia la tecnología de transmisiones continuamente variables (CVT, por su sigla en inglés) en automóviles de calle.
La mayoría de cajas automáticas funcionan bajo sistemas de control hidráulicos de turbinas, o con sistemas que acoplan piñones entre sí (que es el mismo principio de las cajas mecánicas). Por su parte, la tecnología CVT opera con poleas que varían su diámetro, haciendo que teóricamente haya un número infinito de relaciones y la transmisión pueda mantener continuamente el rango óptimo de revoluciones.
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En vehículos pequeños como scooters, motos de nieve y motos acuáticas, estas poleas son muy utilizadas. Nissan es una de las pocas marcas del mundo que utiliza esta tecnología en automóviles, aunque en el Sentra la caja está programada para simular seis puntos de cambio que permiten un manejo más intuitivo para el conductor.
También se encuentra una versión básica que cuenta con caja manual de 6 velocidades, la misma de la Qashqai. Ambas versiones operan con un motor de 1,8 litros y 129 caballos de potencia, que brinda un consumo aproximado de 40 kilómetros por galón en ciudad y 48 en carretera, según las pruebas realizadas por PUBLIMETRO.
Tecnología y lujo
Al contrario de su humilde antecesor, el Sentra 2017 cuenta con todo tipo de “juguetes” y tecnología. En su tablero se encuentra una pantalla de 5 pulgadas que apoya la conducción. Así mismo, cuenta con alertas de punto ciego, de tráfico transversal y cámara de reversa en su versión full equipo, muy útiles en las calles o parqueaderos congestionados.
El volante basado en el del deportivo 370Z cuenta con controles para el equipo de sonido y el sistema Bluetooth, así como para el control de crucero. Las sillas son muy cómodas y la posición de manejo, junto al volante adaptable en profundidad e inclinación, aseguran que no se sentirá cansado luego de varias horas en el camino.
También cuenta con aire acondicionado, ventanas y seguros eléctricos, equipo de sonido con conexión para iPod y equipos Android, encendido mediante botón y dos airbags. La versión full equipo suma control de zona dual para el aire acondicionado (no más peleas porque el aire está muy frío), airbags laterales y de cortina, y sunroof.
El Sentra ya no es un vehículo netamente popular, pero con sus precios desde $59 hasta 72 millones (ver recuadro) es una excelente propuesta para quienes quieren un sedán cómodo y lujoso, con tecnología comprobada y una calidad y suministro de repuestos reconocida como una de las mejores en el país.
PUB/JMR
