«Han sido 20 años conectados a la música y quizás ha llegado el momento de hacer otras cositas», afirma en el arranque de esta pieza, filmada aparentemente en un estudio de grabación, que pone fin a la andadura de su grupo.
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En ella, Donés se muestra agradecido por el «regalazo» que ha supuesto la trayectoria de Jarabe de Palo, «cantidad de cosas buenas, momentos irrepetibles», así como la posibilidad de vivir de su «sueño» y «formar parte de la banda sonora» de tantas vidas.
«Os vamos a echar mucho de menos», dice emocionado, al recordar que, de ahora en adelante, «no habrá escenarios ni música», en un mensaje en el que deja la puerta abierta a un retorno a la actividad artística: «No sé cuándo ni cómo, pero volveremos».
Jarabe de Palo nació en 1996, aupado por el gran éxito del sencillo «La flaca», que dio título a su primer álbum, al que seguirían otros ocho discos más de estudio con temas originales como «El lado oscuro», «Depende», «Agua» o «Bonito».
Fue el pasado mes de julio cuando Donés, a través de su cuenta de Twitter, ya anticipó una retirada temporal de los escenarios para centrarse en su vida personal, especialmente en su familia.
Donés, que lucha contra un cáncer de colon desde 2015 intentado lleva una vida lo más normal posible, realizó a lo largo de 2018 los últimos conciertos con su banda y recientemente publicó el disco «Jarabe Filarmónico» y el libro de colección «100 letras».
«Sobre todo sed felices, porque la vida es urgente, es una y ahora, y hay que vivirla con intensidad», concluye su mensaje.
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