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Ya casi veinte años después, el Cosplay dejó de ser una actividad de nerds chistosos y desocupados del Japón para convertirse en un arte, disciplina y profesión. Tres términos que enmarcan toda una cultura que engloba desde concursos, hasta eventos diseñados solo para ellos, una industria boyante de trajes y pelucas hasta maquillaje y por supuesto, diversidad.
En el Cosplay también se ven temas de género, aceptación del cuerpo y sobre todo, de divulgar trabajos que vayan mucho más allá de las cosplayers famosas y de cuerpos esculturales. Tanto como la moda, quien va más allá de disfrazarse, debe afrontar el escrutinio despiadado. Afortunadamente, eso ha cambiado en años recientes.
Porque hay cosplayers «gender bender» (que cambian de género):
Hasta «Plus Size»:
O incluso de personas mayores:
Pero hay otros cosplayers que son célebres por interpretar muy bien a un personaje en particular. Por ejemplo, «Loki Hates You» lo hace con el personaje interpretado por Tom Hiddleston para el universo de Marvel. Y Leo Camacho, recientemente, lo hace con el príncipe Eric de «La Sirenita»:
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Machado se basa en el «Cosplay Genético». Es decir, quien interpreta a un personaje se basa en sus características físicas y mira si son similares. Si coinciden, construye el cosplay. También tiene personajes como Aladdin, de Disney y «El Capitan Garfio» de «Once Upon a Time».
«La gente adora hacer conversación conmigo sobre el personaje y cuánto le aman. En particular, las mujeres aman al Príncipe Eric y son muy honestas sobre su atracción por él. Es algo muy gracioso (…) yo solamente construyo mis cosas con lo que puedo conseguir de Amazon y deseo desarrollar trajes más elaborados», le dijo a Buzzfeed.
En la galería conocerán la historia de «Thor of Oz», modelo y presentador australiano que se ha hecho viral en redes sociales por su increíble parecido con Chris Hemsworth, quien interpreta el personaje para Marvel.
