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Quemarse, deformarse y quedar vivo. No muchos afrontan con entereza una desgracia de tal magnitud. Y los pocos que logran ver su propia belleza llegan a inspirar de manera impresionante, como Laxmi Saa, víctima de quemaduras con ácido, quien protagonizó su propia campaña de modelaje.
Ahora vean a Julius Gerhardt. Un modelo masculino como cualquiera:
Ahora véanlo con más atención:
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A Julius se le quemó el 90% de su cuerpo. De hecho, eso fue en un accidente que tuvo al pintar un vagón con aerosoles. Despertó luego de un coma y le dijeron que le iban a cortar varias extremidades. Él se opuso. Y tal y como le relató a la revista Cosmopolitan, tuvieron que injertarle piel y tuvo 10 operaciones en cuatro meses.
Ahora su cuerpo luce así (se recomienda ver la imagen con discreción):
A Julius no le dio inseguridad modelar. De hecho, se sintió con más confianza por lo que había logrado, luego de un accidente tan terrible. También le quedaron secuelas en la cara:
«Desfilar sin camiseta para el diseñador Xander Shou fue un gran paso para mí. Antes del accidente le pedía al universo una prueba para hacerme más fuerte. Y esto pasó», relató el modelo.