Washington, 18 abr (EFE).- El Banco Mundial (BM) indicó hoy que los flujos de capital a Latinoamérica se han vuelto a incrementar en el primer trimestre del año, por lo que las economías de la región deben vigilar los impactos de la volatilidad, pese a que países como Brasil o México están bien protegidos.
PUBLICIDAD
El economista jefe del BM para Latinoamérica y el Caribe, Augusto de la Torre, indicó que tras la desaceleración de 2011, en los primeros meses de este año «la menor aversión al riesgo y las bajas tasas de interés en los países ricos ha aumentado el apetito por el riesgo y los flujos de capital de cartera en la región».
De la Torre aseguró que ahora Latinoamérica en general está mejor preparada para hacer frente al exceso de influjos de capital en sus economías y los riesgos asociados, aunque hay países con más exposición y vulnerabilidad a las oscilaciones de los mercados a nivel global.
Recomendados
Bitcoin supera su máximo histórico, impulsado por el primer “fondo cripto” que cotiza con la bendición de los...
La “guerra entre operadores” la están ganando los usuarios
Eventos de ventas online impulsan el comercio electrónico: ¡este lunes hay Cyberlunes!
El BM prevé que Latinoamérica pueda mantener hasta 2013 un crecimiento de entre un 3,5 y 4 por ciento, pese a que las incertidumbres sobre la marcha de la Eurozona pueden añadir dificultades adicionales.
En opinión del economista, la región está aprendiendo a vivir con la volatilidad de los mercados internacionales, aunque los fondos tratan ahora a Latinoamérica mejor que a países del Sudeste Asiático o de Europa del Este.
«Las economías latinoamericanas están siendo consideradas más atractivas, pero las decisiones de los fondos de inversión dependen menos de lo que quisiéramos de las políticas domésticas y se fían mucho de factores globales», indicó De la Torre.
Señaló que las economías de las región más atractivas para la inversión, como México, Brasil, Chile o Colombia, «han dado a Latinoamérica una nueva cara».
No obstante, De la Torre indicó que el informe del BM está condicionado a la gran incertidumbre en los mercados mundiales «con dinámicas muy volátiles que responden de manera amplificada a cualquier noticia».
En concreto, el informe del BM sobre volatilidad en Latinoamérica señala que países como México o Brasil están mejor preparados para hacer frente a escenarios de la economía global negativos, como una ralentización en Estados Unidos, una desaceleración en China o una caída de los precios de las materias primas.
El organismo multilateral destacó el amplio margen de maniobra que le ofrece a Brasil su política monetaria para hacer frente a «shocks» externos, mientras en el caso de México recalcó su disciplina macroeconómica pese a la falta de un mayor crecimiento.
En el otro extremo, el BM destaca la alta vulnerabilidad de economías como Ecuador y Venezuela a los precios de las materias primas y del petróleo, así como algunos países centroamericanos por la «dolarización» que no les permite echar mano de medidas monetarias y solo por el lado fiscal.
El informe subraya que las dinámicas de flujos de capital de inversión en Latinoamérica son diferentes a ciclos anteriores.
De la Torre destacó que en la actualidad los grandes administradores de activos internacionales «amplifican las fluctuaciones en busca de retornos en el corto plazo y de algún modo provocan actuaciones en manada».
De todas maneras, las buenas políticas económicas de los países latinoamericanos han demostrado ser un imán para inversiones de largo plazo y tener un efecto inmediato durante un proceso de recuperación.
En cuanto al proteccionismo, el responsable de Latinoamérica en el BM recordó que es algo «fácilmente entendible desde el punto de vista individual de un solo país, pero no desde el de la comunidad global, por lo que es necesaria la coordinación».
Además de Brasil, De la Torre auguró que México aumentará su «atractivo» durante este año «gracias a una moneda más competitiva» y la buena administración de su política monetaria y fiscal.
En el caso de Argentina, recordó que el reciente contencioso por la expropiación de YPF a la petrolera española Repsol, determinará la percepción de los inversores sobre el país dependiendo de cómo se diriman posibles litigios y compensaciones.