Un grupo de veterinarios y biólogos se desplazó este lunes al sur de Bolivia para tomar muestras de los más de 30 cóndores que fueron hallados muertos en una quebrada en la región de Tarija, para determinar las causas exactas del deceso de estos animales.
PUBLICIDAD
Autoridades nacionales y regionales se encuentran desde la mañana en la zona, que también es resguardada por la Policía, informó a los medios el gobernador departamental de Tarija, Adrián Oliva.
El área debe permanecer resguardada porque se debe «levantar muestras» y «hacer una inspección con la autoridad competente» para identificar la causa de la muerte de los cóndores, indicó.
«Hoy (lunes) va a llegar un grupo de biólogos y veterinarios que van a trabajar para levantar muestras e identificar en el lugar qué es lo que ha pasado», explicó Oliva.
Según la información preliminar, en el lugar han muerto unos 35 cóndores, 17 hembras y 18 machos, pero además hay otros animales que también fallecieron, incluidos un chivo y algunos perros, según Oliva.
«Entonces hay que identificar qué es lo que ha provocado esto y dar con los responsables, porque no se puede quedar esto impune», sostuvo el gobernador.
El área donde se produjo el suceso es una quebrada despoblada aledaña a la comunidad de Laderas, a unos 40 minutos de la ciudad de Tarija, y se cree que las aves murieron por envenenamiento.
PUBLICIDAD
Aquella hipótesis deberá ser confirmada o descartada con la investigación que harán los biólogos y veterinarios, explicó por su parte el director de Biodiversidad de la Gobernación de Tarija, Eduardo Rueda.
Otro equipo está a cargo de hacer un «rastrillaje» del área en busca de «otros animales muertos que puedan causar cualquier tipo de intoxicación en la zona», manifestó Rueda.
Las acciones se coordinan con representantes del municipio de Tarija, el Viceministerio de Medio Ambiente, el Ministerio Público, el Bioparque Urbano de Tarija y la Policía Forestal y Preservación del Medio Ambiente (Pofoma), que fue la primera instancia a la que acudieron los lugareños al percatarse de la muerte de las aves.
Rueda pidió a la población que evite acercarse a la zona porque «no es algo para venir a sacarse fotos» y, lejos de ayudar, se puede entorpecer las investigaciones.
Otro equipo conformado por abogados y representantes de la Fiscalía se encargará de los procedimientos jurídicos que correspondan, señaló por su parte el viceministro de Medio Ambiente y Biodiversidad, Magín Herrera.
Organizaciones ambientalistas y activistas se volcaron las redes sociales para expresar su repudio por la muerte de las aves y exigir que el suceso no quede impune.
Una ley vigente en Bolivia desde 2015 establece que el biocidio es un delito sujeto a una sanción de dos a cinco años de prisión.
El cóndor es considerado un símbolo nacional en Bolivia, por lo que se encuentra en su escudo de armas, como también sucede en Chile, Ecuador y Colombia.