Nelson Ramos, indignado con la criminal patada al portero del Slavia
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Una jugada que le dio la vuelta al mundo. La patada que Kemar Roofe, del Rangers de Glasgow, le pegó al portero Ondrej Kolar del Slavia Praga dejó a todos los hinchas del mundo con los nervios de punta. La entrada fue violenta y por los taches le cortó parte del rostro, algo que sacó del partido al guardameta. También se fue el victimario, expulsado.
Pero la cuestión no terminó allí. En todo el planeta, Kolar recibió la solidaridad de su gremio, mientras que el repudio al delantero inglés a las órdenes del conjunto escocés fue generalizado.
En Colombia, en un trino el arquero Nelson Ramos condensó las dos sensaciones. Por un lado señalaba a Roofe, pero más que nada defendía a su colega de profesión. Asimismo le pidió prudencia a los delanteros, entendiendo que ellos no pueden usar las manos, pero advirtiendo que eso no les da el derecho de entrar con excesiva violencia.
«Nuestra posición se presta para salir con las manos y donde no podemos salir armados pero el jugador solo tiene los pies pero también que sepan que hay balones que no se puede llegar así pienso yo», manifestó Ramos.
El portero que hoy tapa en el Boca Juniors de Cali fue víctima de golpes durante toda su carrera. Sin embargo, ninguno como el que recibió el checo Kolar, quien se recupera. Ahora espera estar disponible para el histórico juego de su equipo en cuartos de final de la Europa League, cuando el Slavia se mida al Arsenal de Inglaterra buscando hacer historia.