ENTREVISTA EXCLUSIVA CON LA MEJOR ESCALADORA EN ROCA DE COLOMBIA, MARÍA ALEJANDRA CONTRERAS.
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¿Cómo inició en la escalada?
Comencé a escalar a los 19 años. Afortunadamente, este no es deporte como el fútbol donde a los 30 años ya estás un poco viejo. Hay escaladores de 60 años muy fuertes. Desde los 6 hasta los 15 años fui nadadora de competencia, pero a los 19, una amiga tenía unas entradas para un muro de escalar, me invitó, fui y me encantó. Ahí empecé en ese muro artificial y hasta el sol de hoy.
Usted es colombovenezolana, ¿cómo es esa historia?
Nací en Venezuela y mi papá es colombiano. Él fue uno de los miles de ciudadanos que migraron de Colombia a Venezuela hace varios años. Allí, hizo su vida, pero la verdad es que mi padre es un amante de su país. De hecho, nuestras vacaciones siempre eran en Colombia. Por eso, crecí sintiéndome muy cercana a Colombia. Y ya hace cinco años decidí venirme para este hermoso país.
¿Por qué representar a Colombia y no a Venezuela en las competencias?
Representar a cualquiera de los dos países, me da el mismo orgullo. Siento mucho cariño por ambos. La razón es sencilla. Cuando vivía en Venezuela, representaba a Venezuela, ahora que vivo en Colombia, creo correcto representar a Colombia. Aquí es donde entreno, formo gente de acá y a mi papá le da mucha alegría.
En 13 años de carrera, ¿esperaba tener esos resultados y ser la mejor escaladora del país?
Cuando me enamoré de escalar, mi intención nuca fue competir ni ser la mejor. Pero me gustó tanto que le entregué lo mejor a este deporte y las cosas empezaron a pasar. Para mí, entrenar cuatro horas es felicidad. Amo este deporte. Tanta dedicación, me llevó a ganar competencias. Fue en ese punto donde me di cuenta de que el cuento se estaba volviendo serio y ahí nacieron las metas.
Comparado con otros deportes, ¿cree que falta apoyo para la escalada?
Lamentablemente, en Sudamérica, la escalada es un deporte pequeño. De hecho, cuando uno dice que es escalador, la gente pregunta si uno quiere subir Eleverest porque confunden la escalada con el montañismo. Al no mover masas ni ser popular, es difícil conseguir apoyo. Por ejemplo, en este momento, soy la mejor escaladora en roca de Colombia y pocos lo saben, pero todos sí saben quién es James Rodríguez. Las marcas apoyan lo que las masas piden, esperamos que a partir de los próximos Olímpicos, como la escalada estará, recibamos más apoyo.
¿El reconocimiento que recibió la escalada por parte del ministerio del Deporte no ha influido?
La Federación acababa de reactivarse hace unos meses, pero justo llegó la pandemia. El plan era que, tras esa reactivación, iniciaran las competencias y sacar la selección nacional porque, hasta el momento para los Olímpicos, Colombia no tiene representación en escalada. Siendo sincera, por ahora no se ha visto ningún cambio debido a la pandemia. Este año no habrá competencias. Esperar que para el próximo se pueda hacer algo.
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Como referente, ¿no puede hacer algo para cambiar esa imagen en un futuro?
Los dirigentes de la Federación me han propuesto que sea la representante de los atletas, así que lo podría mirar. Por ahora seguiré siendo escaladora y entrenadora. Le enseño a un grupo de niños, los apoyo y quiero formarlos para que sean la generación de relevo.
Con cuál faceta se queda, ¿como deportista o entrenadora?
En este momento, como deportista. Quizá más adelante, como entrenadora. La escalada permite estar vigente por muchos años. Me gusta enseñar, pero lo que me apasiona es escalar.
Ante la falta de apoyo y de competencias, ¿cómo mantenerse motivada?
Estos años, al no haber Federación, no podía competir a nivel internacional. Sin embargo, estaba la escalada en roca, que es la escalada en su esencia. Esa es una buena manera para mantenerme motivada. Aquí no necesariamente se necesitan competencias para ponerse metas. Pero, independiente de eso, espero que lo de la Federación avance.
¿Cómo ha sido la preparación física y mental en medio del confinamiento, teniendo en cuenta que es un deporte que necesita hacerse al aire libre?
Estoy a la expectativa. Construí un muro, pero en mi casa y la roca es diferente. Igual, creo que lo primordial es la parte mental. Esto es de manejar la ansiedad, de concentración y de no tenerle miedo a las alturas. Estoy entrenándome físicamente, pero cuando vaya a la roca sé que será diferente. Quizá al principio me sienta insegura o ansiosa, pero al tener varios años en este deporte, sé que durará poco.
¿No han propuesto protocolos para que la escalada regrese?
Los muros de escalada enviaron una carta a la Alcaldía de Bogotá para ver si les daban permiso bajo ciertas restricciones, pero la respuesta no fue positiva. Respecto a la escalada en roca, lo complicado no es escalar en el lugar porque están al aire libre, el problema es llegar a los lugares por las restricciones de movilidad.
Usted afirmó que “la escalada es un deporte de puros detalles”, ¿considera que ese es el factor diferencial con relación a las demás disciplinas?
Hay gente que piensa que la escalada es solo tener fuerza en los brazos y ya, pero no. Esto es de detalles porque por solo dos centímetros puede o no hacer un movimiento en la roca. Esto es de consciencia corporal, análisis de la respiración y visualización de la ruta.
Ahora que la escalada estará en los Olímpicos de París, ¿se convierten en su nuevo objetivo?
Me encantaría, pero le voy a contar bien cómo es todo y por qué será difícil. La escalada tiene tres modalidades: velocidad, dificultad y boulder. Lamentablemente, para los Olímpicos, la escalada va a participar como si las tres modalidades fueran una sola. Ahí empieza el problema. En Bogotá ni siquiera hay muro de velocidad. Por ende, al no poder prepararme en esa modalidad, será muy difícil clasificar. Puedo ser buena en las otras modalidades, pero si en esa no puedo, no hago nada.
¿Por qué el apodo de ‘Alita’?
La historia es muy charra (risas). Me llamo Alejandra y una amiga, en lugar de decirme Alejandrita porque le parecía muy largo, empezó a decirme ‘Alita’. Desde ahí ese es mi nombre artístico.
Usted tiene un programa de responsabilidad social llamado ‘Escalando Fronteras’, ¿cómo es y qué busca con él?
Ya vamos por la segunda edición. En 2019 la hice en octubre y este año también pienso hacerla en esa fecha. Eso sí, le estoy dando un poco de tiempo para ver si los muros de escalada abren y así hacer una competencia en persona. En caso de que no, pienso hacer una competencia virtual. La idea es recolectar fondos para un hospital en Venezuela de niños con cáncer que ayudo. Como sabe, en Venezuela, la situación es compleja.