- España | El país europeo está conmocionado con los contagios de COVID-19 en el plantel del Fuenlabrada que desnaturalizaron el desenlace en segunda división, ¿qué pasaría si ocurre en Colombia?
El fútbol en Colombia cada día está más cerca de retornar. Los entrenamientos en los equipos han retornado y solo falta que los dirigentes se pongan de acuerdo para que la pelota vuelva a rodar, eso sí, en medio de una pandemia.
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Como ningún otro deporte, el fútbol desafió al virus y la nueva normalidad europea marca la hoja de ruta en el mundo entero. Sudamérica está volviendo de a poco, sin importar el contexto sanitario en algunas latitudes, como en Brasil donde el fútbol se desarrolla a pesar de la numerosa cifra de muertos que se producen a diario.
Colombia está en pista de despegue, con fechas tentativas a inicio de septiembre, presionadas también por el anuncio de la Conmebol de la vuelta de la Copa Libertadores el 15 de septiembre. Más allá de los contagios en el país, el fútbol está empecinado a volver, sobre todo por temas económicos. Esa fecha se conocerá el 25 de julio en la asamblea de la Dimayor.
Sin embargo, mientras en Colombia se solucionan los últimos recovecos para la vuelta del fútbol, las noticias desde Europa, particularmente desde España, no son las más positivas. El protocolo falló en segunda división, desvirtuando la competencia al no poderse disputar el partido entre el Deportivo La Coruña y el Fuenlabrada. Siete positivos en el plantel del equipo visitante encienden de nuevo las alarmas sobre si es seguro jugar al fútbol de nuevo.
La advertencia española habla de un protocolo muy estricto que puede fallar. De viernes a lunes, tiempo de un partido al otro del Fuenlabrada y cuando saltaron los casos, se hicieron dos pruebas PCR, de las cuales la segunda fue la que arrojó los positivos, dados a conocer cuando la delegación ya estaba en A Coruña. Antes, una prueba de un jugador salió errónea, por lo que el jugador fue aislado a la espera de una prueba fehaciente.
Si en Colombia ocurriera ello, la situación fuese más delicada. El protocolo de la Dimayor habla de pruebas PCR, las más exactas, solo previo a los entrenamientos (ya hechas) y antes de la competencia. Luego, se usarán pruebas serológicas, un poco más falibles, pero a la vez más económicas. Los costos priman para preservar la economía de algunos clubes maltratados y de una Dimayor en crisis.
Ese ha sido un punto de desencuentro entre clubes y futbolistas, quienes pretenden las pruebas más eficaces que resguarden su salud. No obstante, por el bien de la industria se acomodarán para empezar a jugar. De hecho, el protocolo de Dimayor hasta el momento no contempla un escenario masivo, algo que según consulta, se determinará en la mencionada asamblea del día 25.
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Por otro lado, el caso Deportivo-Fuenlabrada formuló un interrogante sobre el desarrollo de la competencia. Las críticas en España pasan por la realización de la última jornada de segunda división, pese a desnaturalizar el campeonato con la cancelación del partido en A Coruña.
Algunos equipos anunciaron recurrir a la justicia ordinaria para dirimir la legalidad de esta última fecha. Es el caso del Deportivo, quien descendió a tercera división sin la posibilidad de jugarse su honor en el campo. Lo mismo el Elche, tercero en discordia que cree que el Fuenlabrada tiene ventaja cuando se dispute el partido y lo puede desplazar de la posición de calificación al playoff de ascenso a Primera División.
En Colombia no está reglamentada la norma qué pasa en la última jornada cuando se debe dirimir clasificación a cuadrangulares, o los temidos descensos. No obstante, las últimas jornadas se juegan a la misma hora por un pacto entre equipos durante las últimas dos décadas.
¿Pero si tocara cancelar un partido por coronavirus, cómo actuarían? Preguntas sueltas que aún no tienen respuestas, pero que hay que prever ante lo que sucede en el mundo, casos que nos recuerdan que el virus sigue allí como desde que empezó la pandemia y no debemos menospreciarlo.
