Cientos de niños colmaron el coliseo cubierto de Paipa para estar más cerca de su héroe, Nairo Quintana. Algunos venían desde localidades remotas. Otros eran víctimas del conflicto, o hijos de familias en situaciones muy complejas. Unos más eran vecinos del municipio turístico del centro de Boyacá, que iban con sus padres solo a ver al ídolo. A tener cerca al ganador del Giro de Italia y la Vuelta a España.
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Solo que Nairo no habló tanto. Le cedió el espacio a cuatro jóvenes que contaron sus historias. Son miembros del programa Nuestro Unicef, creado por la dependencia de la ONU con el fin de apoyar el desarrollo de comunidades en riesgo. El corredor de Cómbita fue insistente en mostrar cómo ellos también eran líderes, con historias que merecían ser seguidas. Tanto como la suya.
Normalmente estas charlas se dan en colegios de regiones apartadas o de zonas periféricas de las grandes ciudades. En esta oportunidad, Unicef y Nairo decidieron hacerlo en un gran marco. La primera marcha cicloturística que organizó el corredor, el Gran Fondo Nairo Quintana, daría su largada menos de 24 horas después. Más de 2000 ciclistas aficionados empezaban ya a llegar al valle central de Boyacá.
Para el corredor de Movistar, era tan importante darle un apoyo a esos niños como a los aficionados. Y no sería su único acto benéfico. En la carrera participaron 30 huérfanos de un hogar de Tunja, a los que Nairo conoció gracias a un profesor de un gimnasio. También lo hicieron más de 50 ciclistas paralímpicos, quienes no pagaron la entrada de esta carrera.
Esta es una faceta poco conocida del ‘Cóndor’, pero que resaltó en el fin de un 2018 que no colmó sus expectativas. La etapa ganada en el Tour de Francia fue la mayor victoria en un año en el que no pudo meterse al top 5 de ninguna carrera grande. En sus facetas de emprendedor y benefactor, por el contrario, Nairo Quintana solo está creciendo.
El circo de la biela en Paipa
El Gran Fondo Nairo Quintana es solo una de muchas competencias para aficionados que están desarrollando los profesionales. Cabe no más ver el ‘Giro de Rigo’, que organizó Rigoberto Urán en noviembre por vías de Antioquia y que contó con Chris Froome. Aún sin el renombre del británico, en la carrera hubo un hombre del Sky: el joven Egan Bernal rodó con ‘Nairoman’ y Winner Anacona, como representantes del World Tour en las carreteras boyacenses.
A su lado también estaba un pelotón verde. Son los corredores del equipo profesional Boyacá Es Para Vivirla y el programa Boyacá Raza de Campeones. Uno de los elementos más marcados de los apoyos de Nairo ha sido trabajar con grandes organizaciones. Unicef, la Fundación Telefónica, la Gobernación de Boyacá y el Ministerio de Agricultura cuentan con el de Cómbita para apoyar su labor.
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Además, en la zona de la partida hubo grandes diversiones para miles de personas. El Ejército Nacional llevó un circo, una exhibición de las Fuerzas Especiales y el helicóptero de la Operación Jaque. En meta, en el monumento del Pantano de Vargas, soldados con los uniformes de la Independencia entregaron las medallas.
Nairo tiene un hermano en el Ejército, y un gran respeto por los uniformados, que le ha permitido este apoyo. También tiene el de muchos gobernantes, pero en sus propias palabras, «soy solo una persona contra muchas problemáticas». Por eso, sus ayudas van a través de organizaciones oficiales que pueden extenderlas ampliamente.
Nairo hace empresa
Aún cuando todos estos detalles apuntan a un Nairo Quintana benefactor, no puede negarse el cáracter práctico del mismo. «Prefiero donar a una institución grande, que es capaz de llegar a muchas partes, y no solo a algo muy pequeño», dice. También se nota así en la carrera.
En el Gran Fondo solo se inscribieron 2000 personas. No por falta de interés: la inscripción acumulaba un uniforme de ciclismo modelado al estilo del de Movistar. «Hubiéramos querido recibir muchas más personas, pero las limitaciones de logística nos lo impidieron», asegura. Y cree que para el 2019, las inscripciones empezarán mucho antes para una prueba que podría ser aún más grande.
Esto, sumado a la creación de su marca de ropa, también apunta a que el corredor empieza a pensar en un futuro abajo de la bicicleta. ¿Ideas para un futuro?. Si en un principio era el rival máximo de Froome, la aparición de otros corredores jóvenes como Julian Alaphilippe, Simon Yates y el propio Egan Bernal le suma rivales. Por edad, Nairo no debería preocuparse.
A sus 38 años, su compañero y mentor Alejandro Valverde ganó el Mundial de Ciclismo en Innsbruck. Actualmente tiene 28 años, la misma edad que Froome tenía cuando ganó su primer Tour en 2013. Y con dos grandes vueltas ya en su bolsillo, es el ciclista más exitoso de la historia de Colombia. Pero no es suficiente.
«Retirarse no está en nuestros planes. Todavía tenemos un sueño, tenemos muchas carreras que ganar, y mientras estén las piernas, ahí estaremos», dice el corredor. También advierte de la necesidad de dejar de pensar en inferioridad, ya sea ante un ciclista extranjero o un gobernante que se niega a apoyar sus iniciativas. Estas son, tal vez, las lecciones que más aprenden los niños en su fundación.
El 2019 de Nairo Quintana
El ciclista, en medio de los eventos de esta fiesta, también tuvo tiempo para hablar de deportes. Anunció sus primeras participaciones en las carreras del próximo 2019, entre las que se cuenta un positivo Tour de Francia.
El recorrido del Tour de Francia de 2019 fue anunciado en octubre. Pinta para escaladores, con solo 27 km de contrarreloj individual y con siete puertos por encima de 2000 metros de altitud. Este podría ayudar a las aspiraciones de Nairo. El rival será el de siempre, Christopher Froome.
El cuatro veces ganador del Tour tendrá un primer encuentro con Nairo en las carreteras de Antioquia. El Tour Colombia 2.1, que se correrá del 12 al 17 de febrero, tendrá la presencia de ambos. Su temporada empezará el 27 de enero en Argentina. El corredor de Cómbita liderará al equipo Movistar en la competencia, hasta el 3 de febrero. Por tanto, no hará parte de los Campeonatos Nacionales de Ciclismo.
Finalmente, dijo que no tiene planeado el resto de la temporada, pero no correrá el Giro de Italia. El objetivo del corredor será participar, luego del Tour, en la Vuelta a España 2019, en septiembre.