Yerry Mina forzó la prórroga con un gol en el tiempo de prolongación de la segunda mitad y canceló el tanto inicial de Harry Kane (1-1), pero el empate se mantuvo durante los 30 minutos siguientes y el duelo se decidió desde los lanzamientos desde el punto de penalti.
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A continuación, las cinco claves de la derrota ante Inglaterra y la posterior eliminación del Mundial:
1. RESPETO EXCESIVO POR EL RIVAL
Ante la baja de James Rodríguez por lesión, la duda era saber si finalmente José Pekerman se atrevería a salir de inicio con Luis Muriel -junto a Cuadrado, Quintero y Falcao- o apostaría por un sistema más defensivo. Hizo lo segundo, con un trivote -Sánchez, Lerma, Barrios-, y demostró un respeto excesivo por la selección inglesa. Pese a demorarse con los cambios, reaccionó tras el 0-1 de Kane y ahí Colombia mejoró. Pekerman volvió a pecar de defensivo.
2. NO JAMES, NO PARTY
James es James y su ausencia siempre se va a notar, tanto en lo futbolístico como en lo anímico. Es el mejor jugador de la selección y una figura insustituible. La no presencia del ’10’ era algo que se barruntaba desde hacía días -salió lesionado en el partido ante Senegal y no se entrenó junto a sus compañeros-, pero nadie sabía cómo estaba realmente. Finalmente no jugó -no estuvo ni en el banquillo de suplentes-, Pekerman modificó el once ante la ausencia de su estrella y Colombia perdió en calidad y se quedó sin su referente.
3. LA ‘ROCA’ SÁNCHEZ NO ES UNA ROCA
El fútbol es un deporte de equipo y no se puede culpar a un solo individuo por la eliminación. Sin embargo, el rendimiento de Carlos ‘La Roca’ Sánchez en esta Copa del Mundo ha estado muy por debajo del esperado. Titular en tres encuentros -en el primero, ante Japón, jugó tres minutos tras ser expulsado-, cometió dos penaltis y recibió una tarjeta roja y una amarilla por errores infantiles. A este nivel los errores así se pagan.
4. FALTA DE CABEZA FRÍA
Con el 0-1 de Inglaterra y Colombia buscando desesperadamente el empate, los hombres de Pekerman empezaron a cortar el juego con faltas inoportunas, trifulcas y un juego excesivamente físico. Los ingleses, claro, jugaban a placer, puesto que pasaban los minutos y se acercaban a cuartos de final. A los ‘cafeteros’ les ‘despertó’ el gol de Yerry Mina y les dio alas para la prórroga. A los jugadores se les vendió que ésta era una oportunidad histórica y les tocó vivirla sin James. Eso pesa.
5. LA ¿LOTERÍA? DE LOS PENALTIS
La suerte de los penaltis, la lotería de los penaltis. Se dice de muchas maneras distintas, pero la realidad es que los lanzamientos desde los 11 metros tienen, además de un dosis ligera de suerte, una elevada carga de preparación y técnica. Inglaterra no ganaba una tanda desde 1996 y los penaltis eran su maldición particular. Colombia falló dos e Inglaterra marró uno, y el héroe de los ‘Tres Leones’, el guardameta Jordan Pickford, reveló tras el duelo que sólo uno de los lanzadores colombianos, Radamel Falcao, no lo tiró donde habían estudiado. «Los estudiamos a todos y Falcao fue el único que cambió de lado», reveló. El resto, muy predecibles. EFE