Una de las mayores preocupaciones en el fútbol profesional colombiano es el surgimiento de futuras promesas. No es para menos. De ello depende gran parte del crecimiento de las selecciones Colombia. Sin embargo, este semestre se puede estar tranquilo porque la cuota de jóvenes figuras parece haberse cumplido. Y no solo eso. Lo importante es que aparecieron futbolistas en la mayoría de las líneas, especialmente, en la zona ofensiva.
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Jorman Campuzano
La principal apuesta de Atlético Nacional cuando contrató a principio de año dio resultados. A pesar de no llegar con los bombos y platillos que recibieron jugadores como Monetti, Vladimir, Helibelton y Zúñiga, el mediocampista proveniente del Deportivo Pereira se ganó el corazón de la hinchada gracias a su esfuerzo y sacrificio expuesto en cada partido. No en vano, se hizo con un puesto en la titular de Jorge Almirón.
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Yairo Moreno
Después de cuatro años adquiriendo experiencia en clubes como La Equidad y Envigado, el volante ofensivo regresó al Independiente Medellín para brillar. En el 2017 no resaltó lo suficiente. Sin embargo, en este semestre sobresalió de gran manera. Los números lo demuestran. Siete goles en 16 encuentros son la prueba de ello. Además, se convirtió en pieza clave para Ismael Rescalvo.
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Geovanni Banguera
Seguridad bajo los tres palos. Este es el cuarto año consecutivo del guardameta con Atlético Huila, pero hasta esta temporada sacó a relucir todo su potencial de la mano de su entrenador Néstor Craviotto. El portero fue, sin lugar a dudas, uno de los principales responsables de la clasificación de los ‘opitas’ a los playoffs. Sus maravillosas atajadas, fecha a fecha, evitaron que su escuadra recibiera varios goles.
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Sebastián Villa
No es casual que sea pretendido por varios clubes grandes del fútbol local. Su velocidad, desborde, técnica y capacidad para encarar a tan corta edad (21 años), lo hacen un futbolista bastante interesante y completo. Por eso, en el Deportes Tolima es la estrella. De igual manera, no le quedó nada grande cumplir con la difícil labor de llenar el vacío de Andrés Ibargüen, quien en su momento fuera el hombre de mostrar.
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Deiber Caicedo
Delantero, 18 años y de las divisiones menores del Deportivo Cali. Así es el atacante del cuadro ‘azucarero’. En un equipo lleno de referentes como Abel Aguilar, Andrés Pérez, Camilo Vargas y Nicolás Benedetti, este joven convenció no solo a Gerardo Pelusso sino también a la afición. Ese amor se selló después del asombroso gol de tiro libre marcado frente al Boyacá Chicó. Dicha anotación es la única conseguida, hasta el momento, en nueve compromisos disputados.
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