Lucho Herrera venció a algunos de los rivales más difíciles de la historia del ciclismo, pero se encuentra actualmente en su más duro reto. El ‘escarabajo’ más grande que dio Colombia en los años 80 se enfrenta actualemnte contra el cáncer.
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El corredor que ganó la Vuelta a España en 1987 y la camiseta de líder de la montaña del Tour de Francia en 1985 dialogó con el programa «Testigo Directo» del periodista Rafael Poveda, en el que le comentó la dura situación que vive debido a una mancha que apareció en un brazo.
«La enferemedad comenzó con una mancha grande en un brazo, y yo pensé que eso era normal. Después fui a un médico dermatólogo, y me advirtió que tenía muchas manchas en las manos en la cara. Luego me salió una ‘cosita’ en la parte superior del rostro y cuando me hicieron la biopsia, resultó maligno», dijo.
Para Lucho Herrera, uno de los temas más difíciles ha sido que todas estas lesiones han provocado algunos tipos de cáncer invasivo, pero a nivel dermatológico, estas lesiones no han tenido mayor gravedad. «Tuvo un carcinoma basocelular y también presentó otra lesión en el antebrazo (…) ya tuvo cánceres que eran ya digamos invasivos”, dijo el médico que atiende estas lesiones.
Gran parte del problema se debe a las horas que debió competir a la luz del sol a lo largo de más de 12 años de competencias a nivel nacional e internacional. El corredor del Café de Colombia debió entrenar y competir durante más de 5 horas diarias por meses en fin, a temperaturas de hasta 40 grados como en el Tour de Francia.Estas hoas dejaron un daño crónico en la piel del corredor de Fusagasugá, quien necesita sesiones adicionales para evitar que se extienda el daño en su cuerpo.