¡No más violencia! El poder de las barras bravas es pan de cada día en toda Sudamérica. Desde el sur hasta el norte, las noticias sobre desmanes, muertes, enfrentamientos entre ellos, apoyo de los directivos, entre otros flagelos son notificados a diario.
PUBLICIDAD
Esta vez, las víctimas fueron los jugadores del plantel de Excursionistas, en la tercera categoría del fútbol argentino. Luego de caer derrotados 5-0 ante Comunicaciones, en un partido que es considerado como un clásico, los futbolistas y el cuerpo técnico fueron emboscados por 70 hinchas del equipo local, que los golpeó y les robó la pertenencia, insólitamente sin presencia policial.
Después de cometer el suceso y tras haber arrinconado a los jugadores en el vestuario, cerca de 30 policías se acercaron, pero lejos de hacer justicia, retiraron a los barras bravas de Comunicaciones y los escoltaron hasta sus buses, sin ni siquiera requisarlos.
Recomendados
Momento exacto en que el técnico de Palestino se va al baño en pleno partido contra Millonarios
“Es el comodín del grupo”: Le pasaron factura a Antonio Casale por sus palabras sobre Palestino
Juan Pablo Vargas insinuó que el arbitraje perjudicó a Millonarios, pero no por lo que muchos piensan
El plantel de Excursionistas quedó traumado de la situación, advirtiendo que pudo haber sido peor. El técnico del equipo, Guillermo Szeszurak, aseguró que en el fútbol argentino se coquetea con la muerte a menudo.
“Necesitamos que la AFA nos empiece a cuidar, ya no sabemos que hacer. Tenemos la vida en riesgo constantemente”.
Por ahora, se debate en Argentina si el fútbol profesional debe parar o no, aunque parece que se continuará como si nada.
En Colombia, este tipo de amenazas y agresiones a los futbolistas también se presenta. Hace poco, barras bravas del Deportivo Cali hostigaron a Mayer Candelo, exigiéndole explicaciones por los malos resultados del equipo azucarero. En ese momento, Dimayor tomó pocas medidas.
El fin de semana pasado, un hincha de Alianza Petrolera murió en enfrentamiento de barras bravas entre el equipo santandereano y Millonarios, en Barrancabermeja.
Las barras bravas tal parece que son una epidemia en el fútbol de esta parte del mundo, donde lastimosamente en Colombia copian las acciones que vienen desde el sur del continente, especialmente desde Argentina. Ojalá esta vez sea la excepción.
(Haga clic acá para ver el escalofríante relato del robo que sufrió el equipo argentino)